Se podrá llamar la «National Association for Stock Car Auto Racing», pero en la NASCAR dejaron de competir auténticos vehículos de stock hace mucho tiempo. Eso sí, una marca como Chevrolet necesita mantener las apariencias.
Chevy previamente pilotó su SS en NASCAR, pero este modelo está saliendo de la producción. En la necesidad de dar un nuevo nombre para mantener “visibles” sus autos de carreras, Chevy se ha enfocado ahora en su Camaro ZL1. A partir de 2018, el ZL1 se convertirá en la nueva cara de Chevy en NASCAR, aunque bajo su piel usará básicamente el mismo chasis y tren de potencia que el SS NASCAR.
Cuando se estrene a principios del próximo año, el Camaro ZL1 competirá en la Monster Energy Cup, la primera serie de NASCAR. Los Camaros de carreras han participado anteriormente en la serie de menor nivel Xfinity desde 2013, y seguirán haciéndolo. Sin embargo, usarán el distintivo Camaro SS, creando una jerarquía que refleje la diferencia de rendimiento entre los Camaro SS y los Camaro ZL1.
El ZL1 competirá contra los Ford Fusion y los Toyota Camry. Cualquier persona familiarizada con las versiones “de carretera” de estos vehículos podrá encontrar esta competencia ridícula, pero créenos si te decimos que las versiones “de competición” de estos carros son más o menos iguales. Cualquiera que sea la marca que el fabricante decida utilizar, todos los autos de carrera NASCAR utilizan un chasis y unos motores V8 similares. Eso se debe a reglas estrictas que tienen como objetivo mantener el nivel de competición, optimizando el diseño de los carros para las pistas de NASCAR.
Chevy merece un poco de crédito, o al menos, nuestro “beneficio de la duda”. El Camaro ZL1 “de carretera” realmente viene con un motor V8 y tracción trasera, al igual que el modelo de carreras. Las similitudes terminan ahí, pero —al menos— ambas versiones comparten algún ADN común.
El ZL1 “de calle” también es un automóvil de pista realmente capaz. Es un deportivo con un V8 de 6.2 litros sobrealimentado de 650 caballos de fuerza (al igual que el Corvette Z06), y alcanza una velocidad máxima de 198 mph. No por nada, rodó en el legendario circuito de Nürburgring de Alemania en un impresionante tiempo de 7:29.60.
Ahora sí, un auto Camaro de carreras que está mucho más cerca de la versión de carretera está ya rodando por las pistas de EE.UU. Se llama el GT4.R, y es una versión modificada del Camaro de producción, en lugar de ser un auto de carreras construido específicamente. Participa en el Pirelli World Challenge y IMSA Continental Tire SportsCar Challenge.