Te lo contábamos hace unos días, y lo confirmamos. Si quieres presentar tu automóvil del futuro, el CES es el lugar indicado para hacerlo. Solo pregúntale a los de Faraday Future.
En la presente edición CES 2018, Byton ha sido la última compañía en lanzarse al cuadrilátero de la industria automotriz en la forma del Byton Concept, un SUV que tiene más de teléfono inteligente que de automóvil.
Definido como un «dispositivo inteligente» en varias ocasiones durante la presentación, el concepto es un vehículo totalmente eléctrico con la forma y las dimensiones de un crossover, y cuyas principales virtudes apenas giran en torno a la conducción, sino más en cómo aprovechar el tiempo que se pasa en ruta.
En su exterior, el SUV eléctrico se extiende por más de 15 pies, con una distancia entre ejes de 9.6 pies. El exterior está desprovisto de cosas como manijas ni espejos, optando por el reconocimiento facial en el pilar B para permitir la entrada. Por supuesto, unas cámaras retrovisoras reemplazan a los espejos para informarte de lo que sucede en la parte trasera del camino.
Esto —claro— en el caso que de quieras manejar. Preparado con el hardware para sistemas avanzados de asistencia al conductor de nivel 3, tiene todo lo que se necesita para pasar a la autonomía de nivel 4 a través de una actualización de software. Si bien existe todavía un asiento de conductor con un volante y pantalla táctil montada, el interior se esmera en crear un «espacio digital» agradable para el trabajo o el juego.
Adornando un tablero sin ningún botón, vemos una pantalla de experiencia compartida de un metro de largo, lugar en donde los ocupantes —presumiblemente— pueden hacer cosas como ver videos. La ausencia de una consola central, más la posibilidad de que los asientos delanteros giren 12 grados hacia adentro, hace del Byton más un salón de estar móvil que un automóvil propiamente tal.
La interactividad con el vehículo no se consigue a través de botones, sino tanto por la pantalla táctil que está frente al conductor, como dos pantallas montadas en los asientos para el entretenimiento posterior. Si se necesita más interacción, esta se consigue a través de de una serie de gestos con las manos, los cuales (aseguran en Byton) son muy intuitivos. No los vimos en acción, pero vimos las formas de manos que el vehículo podrá reconocer, las cuales van desde un puño cerrado, una mano abierta, y un solo dedo extendido. Un sistema Amazon Alexa integrado completará las opciones de entrada.
Un modelo de tracción trasera estará equipado con un paquete de batería de 71 Kwh con un alcance de 248 millas, mientras que el modelo de tracción total tendrá un paquete de baterías de 95 kwh, que extenderá el alcance a 328 millas. Byton dice que cualquiera de ellos se puede recargar a un 80 por ciento en 30 minutos, pero no está claro qué potencia permitirá este tipo de carga.
Tampoco está claro ninguna capacidad de rendimiento. El modelo de tracción trasera contará con un motor único que produce 200kW o 295 libras-pie de torque. El modelo de tracción total tendrá un motor adicional que ayudará a generar 350kW o 523 libras-pie de torque.
Ah, pero eso no es todo: Byton afirma que el vehículo estará disponible en 2019 en China y 2020 en los Estados Unidos, con un precio inicial de $45,000.
Hay mucho que considerar aquí, pero reconozcamos que hemos escuchado muchas de estas promesas antes. La charla de la autonomía de nivel 3 a nivel 4, y de hacer de tu automóvil más un salón de estar que un carro, es algo que esperamos ver más pronto en Volvo que en cualquier otro, para empezar. También, el reemplazado de los espejos con cámaras es ya una tradición de casi 20 años en este punto. El reconocimiento facial, los perfiles de los conductores e incluso la monitorización de la frecuencia cardíaca suenan más como características diseñadas para hacer que la conexión del automóvil a los teléfonos inteligentes sea lo más capital que cualquier otra cosa. Dicho eso, si la compañía con sede en China puede lograrlo, ciertamente que será un enorme paso dado hacia la normalización de la idea de que un automóvil es más espacio de trabajo móvil que cualquier otra cosa.
Y al igual que con todos los que ya hemos visto antes, esperaremos el progreso de Byton con optimismo… y ya veremos qué pasa.