El poderoso Airlander 10 surcó finalmente los cielos la pasada noche del miércoles, marcando lo que es, hasta la fecha, el primer vuelo de la aeronave más grande del mundo.
Esta nave con forma de dirigible mide 302 pies (92 metros), siendo 50 pies (15 metros) más larga que un Jumbo, y atravesó en el aire sobre el condado de Bedfordshire, a unas 40 millas al norte de Londres. Observado por cientos de personas, el Airlander 10 realizó un vuelo de 30 minutos antes de regresar (sano y salvo) a tierra firme, según informó ABC.
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“Extraordinario” es una etiqueta que se le suele aplicar al Airlander 10. También se le ha llamado “el trasero volador” por su evidente forma frontal… pero no vamos a insistir en esto ahora.
¿Qué lo hace tan especial? Bueno: si su tamaño no te resulta lo suficientemente impresionante, quizás debas tener en cuenta su capacidad para permanecer en el aire sin tocar tierra durante dos semanas, de una sola vez. Ah: y puede estar todo ese tiempo volando sin tripulación.
Combinando diferentes elementos del diseño de aviones, dirigibles, helicópteros y aerodeslizadores, el Airlander 10, se eleva por helio, y es propulsado por cuatro motores diesel turboalimentados. Es capaz de llevar una carga de hasta 10 toneladas, aunque en los futuros diseños esa capacidad debería alcanzar las 50 toneladas.
Este artilugio descomunal, que puede alcanzar alturas de has 16.000 pies (4,900 metros), podría algún día viajar a todos los rincones del planeta, ya que también es capaz de despegar y aterrizar en suelos no sólidos, como el agua, el desierto, o el hielo. en el vídeo mismo se aprecia que no despega de un aeropuerto plagado de hormigón y asfalto, sino de una verde campiña.
Su exterior de tejido laminado es lo suficientemente fuerte como para resistir disparos, algo importante y hasta algo obvio, si consideramos que esta máquina estaba diseñada originalmente para servir al ejército de los EE.UU.. Sin embargo, el plan de utilizarlo en labores de vigilancia fue desechado hace tres años, cuando el gobierno estadounidense retiró su financiación, dejando sola a la pequeña empresa británica de aviación Hybrid Air Vehicles (VHA) para que mantuviese el ambicioso proyecto vivo. Un diseño similar surcó los cielos en 2012, pero ha habido tantos cambios en el diseño desde entonces que, al de este pasado miércoles, se le considera el primer vuelo.
En VHA dicen que el Airlander 10 todavía podría ser utilizado para tareas vigilancia, aunque también tiene otras muchas posibilidades, como lo son el transporte de carga, la distribución de ayuda humanitaria, viajes de placer, e incluso el transporte de pasajeros… Aunque con una velocidad máxima de 80 nudos (90 mph), no podemos esperar llegar muy rápido a ningún sitio.