Alfa Romeo regresará a la Fórmula 1 el próximo año. La marca compitió en la serie durante décadas, tanto como constructor y como proveedor de motores, pero se retiró hace más de 30 años por serios problemas financieros. El futuro parece ahora mejor, y la compañía italiana está lista para regresar.
El equipo suizo Sauber F1 Team acompañará a Alfa Romeo en su regreso a la parrilla de salida. Sauber, que había trabajado con éxito con Mercedes-Benz y BMW en el pasado, cooperará estrechamente con Alfa en todos los aspectos del deporte-tuerca, exceptuando el desarrollo del tren motriz. Los socios transalpinos obtendrán la unidad de potencia de su automóvil de Ferrari, que era la “compañía hermana” de Alfa Romeo hasta que se independizó de Fiat. Sauber se aseguró los derechos de uso de la unidad de potencia de Ferrari el verano pasado.
Los autos llevarán una carrocería distintiva en blanco y rojo, adornada con los emblemas de Alfa Romeo. El ex piloto junior de Ferrari, Charles Leclerc, manejará el primer automóvil, mientras que Marcus Ericsson llevará el segundo. Ambos se medirán a nombres tan grandes como el cuatro veces campeón Lewis Hamilton, que compite por Mercedes-AMG, y el piloto de Ferrari, Sebastian Vettel.
«Este acuerdo con el Sauber F1 Team es un paso significativo en la remodelación de la marca Alfa Romeo», señaló en un comunicado el jefe de la compañía, Sergio Marchionne. «Confiamos en que juntos podamos lograr un gran éxito con el Alfa Romeo Sauber F1 Team, y esperamos tener una asociación larga y exitosa», agregó.
Este acuerdo, de hecho, casi no sucede. Sauber y Honda planearon una asociación técnica para la temporada del año próximo, pero cancelaron el acuerdo pocos meses después «por razones estratégicas», según un portavoz de la marca suiza. Honda habló de «diferencias en la dirección a futuro de ambas partes» como razón del no acuerdo.
El regreso de Alfa es una buena noticia para los fanáticos de la Fórmula 1; la competencia mejora la casta, como dicen por allí. Sin embargo, la celebración podría ser efímera, ya que Ferrari y Mercedes-AMG han amenazado con abandonar la serie después de la temporada 2020, esto como protesta contra las nuevas reglas de motor y topes presupuestarios, tentativamente programados para entrar en vigor en 2021.