Uno de los mayores misterios de la cosmología actual es de qué está compuesto exactamente el universo. Sabemos que toda la materia ordinaria en el universo constituye solo el 5% del universo total, y el resto se compone de construcciones teóricas: el 27% del universo es materia oscura y el 68% es energía oscura. Sabemos que la materia oscura y la energía oscura deben existir porque vemos sus efectos, pero ninguno de los dos se ha medido directamente.
Entonces, para aprender más sobre la energía oscura, se lanzó una encuesta internacional a gran escala llamada Dark Energy Survey para mapear cientos de millones de galaxias. Entre 2013 y 2019, una colaboración de investigadores utilizó una herramienta especialmente diseñada llamada Cámara de Energía Oscura (DECam) en el Telescopio Victor M. Blanco ubicado en los Andes chilenos para estas observaciones. Pero desde que la encuesta ha llegado a su fin, la Cámara de Energía Oscura no ha estado inactiva: ahora se usa para investigar una variedad de temas astronómicos, y recientemente se usó para capturar esta impresionante imagen de la Nebulosa de la Langosta.
Esta nebulosa de 400 años luz de ancho se encuentra a unos 8.000 años luz de distancia de la Tierra en la constelación de Escorpio. Esta nube de polvo y gas está iluminada por estrellas jóvenes y brillantes, con un conjunto particularmente brillante de estrellas masivas en un cúmulo llamado Pismis 24 en el corazón de la nebulosa. Las interacciones de estas estrellas masivas, las estrellas más jóvenes que se forman a su alrededor y los grupos de polvo y gas que eventualmente formarán otra generación de estrellas se suman a la forma compleja y ondulante de la nebulosa.
La captura de estas diferentes características fue posible gracias a la gama de filtros de la Dark Energy Camera. «Esta imagen se construyó utilizando algunos de una nueva gama de filtros de banda estrecha DECam muy especiales, que aíslan longitudes de onda de luz muy específicas», explica NOIRLab. «Permiten inferir la física de objetos distantes, incluidos detalles importantes sobre sus movimientos internos, temperaturas y química compleja, lo cual es especialmente importante cuando se examinan regiones de formación estelar como la Nebulosa de la Langosta».