Si algo sabíamos con certeza al llegar al Steve Job Theater era que –posibles sorpresas aparte– el iPhone “más grande” (el Pro Max) sería la joya de la corona, el gadget que todo el mundo querría tener entre sus manos lo antes posible una vez terminada la presentación.
Y sucedió así… en parte. Sucede que el Apple Watch UItra le robó algo de protagonismo al nuevo buque insignia de Apple –no mucho, pero quizá más del esperado–, aún cuando los más acólitos aplaudían la desaparición nunca bien querido nocht (muesca o pestaña) y la aparición de esa inteligente “píldora” que ahora figura en lo alto de la pantalla.
Además del nocht ya ausente… ¿algún otro cambio significativo? Internos, fundamentalmente, más no demasiados en la periferia. Se parece bastante al iPhone 13 Pro Max presentado el 2021 (y al iPhone 12 Pro Max del 2020, digámoslo). El nuevo Chip A16 hace que todo sea mejor, aún cuando no tengamos la capacidad de apreciarlo tan fácilmente. Que su precio comience en $1,099 es algo que los fanáticos agradecen, ya que los rumores hablaban de un aumento de $100 dólares para este 2022.
Recuerdo que cuando tuve en mis manos el iPhone 13 Pro Max, le quise calzar él el mismo estuche que usaba en el iPhone 12 Pro Max. A mis ojos y en mis manos, se veían iguales, pero el estuche dijo no. ¿Y sabes qué? Lo mismo sucederá ahora, ya que el cuadrado de las cámaras traseras es levemente más grande. Y por milimétrico que sea, esa diferencia hará imposible usar el mismo estuche.
Los bordes se sienten igual, con los botones en la misma distribución, y no hay cambios en el puerto Lightning, a pesar del órdago enviado por la Unión Europea. Aún queda tiempo para hacerlo.
Tendremos que pasar horas usándolo para poder identificar lo que es similar y lo que no con respecto al modelo pasado –sobre todo la cámara principal de 48 mp–. Pero hay una cosa que ya pudimos comprobar, y es que la píldora que que reemplaza a la antigua muesca cambiará la experiencia de uso.
Y es que lo que aquí ha hecho Apple no deja de ser genial. La cámara y el sensor siguen allí, por cierto, y en ningún momento se cubren ni desaparecen. Pero Apple ha rodeado esa píldora de vida, lo que hace que todo se transforma en otra cosa. Es un truco, sí: pero uno bueno. Una jugada de diseño para darle vida y movimiento a algo que, en realidad, ni resplandece ni se mueve.
Por cierto: no se llama píldora, sino Dynamic Island, la cual efectivamente se transforma y se mueve, según lo que quieras hacer con ella.
Por lo demás, el iPhone 14 Pro Max tiene ahora la nueva pantalla siempre encendida, una “novedad” en Apple que de seguro provoca sonrisas burlonas en los usuarios de Android, los cuales llevan viendo está función desde hace años. Así, tanto la hora como las notificaciones que personalices. Pero ¿esto no gasta batería? No tanta como la que se gasta cada vez que desbloqueamos el teléfono. Tampoco sale gratis, pero tendremos que estar días usando el teléfono para comprobar la eficiencia que en este ítem proporcionarán tanto del el Chip A16 como el sistema operativo.
¿Y la cámara? Queremos ya probar con tranquilidad la lente de 48MP y ver qué tanta versatilidad agrega, sobre todo con poca luz, que seguramente será lo más significativo.
¿Correremos a comprarlo? Los fanáticos de Apple que estaban en la presentación no lo dudarán, ya que parecieron alucinar con la Dynamic Island. Y seamos justos: ha sido un golpe de efecto, un cambio mínimo pero real que hará al iPhone 14 Pro Max diferente del iPhone 13 Pro Max de una forma en que este nunca lo pudo ser del 12 Pro Max.