El gigante de la fotografía, Nikon, anunció que bajará la bandera frente a la tecnología y que dejará de vender sus clásicas cámaras réflex de lente única.
Nikkei Asia comentó que esto se debe a estudios internos de la compañía, donde han llegado a la conclusión que no pueden competir con los teléfonos celulares.
Ahora planea enfocar los recursos en las cámaras sin espejo, que se han convertido en productos convencionales gracias a tecnologías digitales más avanzadas.
Desde junio de 2020, cuando Nikon lanzó su buque insignia D6 SLR, no se han lanzado nuevos modelos SLR. La compañía ya ha detenido el desarrollo de cámaras digitales compactas.
A partir de ahora, Nikon tiene la intención de centrarse en las cámaras digitales sin espejo, pero la producción y distribución de los modelos SLR existentes continuará.
Nikon es el segundo mayor fabricante de réflex después de Canon. Una cámara réflex utiliza un espejo para reflejar una imagen que el fotógrafo ve a través del visor.
Los envíos de cámaras sin espejo superaron a las réflex por primera vez en 2020 con 2,93 millones y 2,37 millones de unidades enviadas respectivamente, según la Asociación de Productos de Cámara e Imagen de Japón.