El Gran Colisionador de Hadrones (LHC), ubicado en Suiza, dio pie a otro importante avance en el mundo de la ciencia: la detección por primera vez de neutrinos, que por sus características únicas son muy difíciles de observar.
Los neutrinos son partículas subatómicas con una masa similar a la de un electrón, pero sin carga eléctrica; debido a esto último, detectarlas es un gran desafío para los estudiosos. Sin embargo, los científicos a cargo del proyecto aseguraron que se identificaron seis interacciones de neutrinos durante la prueba, lo que constituye un gran hallazgo, ya que hasta ahora no se habían visto en un colisionador de partículas como el LHC.
“Este es un paso adelante para poder entender de mejor manera los neutrinos y el rol que juegan en el universo”, explicaron al sitio Phys los autores de un artículo publicado en fechas recientes.
El proceso para detectar neutrinos es similar al del revelado fotográfico. En este caso, se aplica lo que llaman un detector de emulsiones que, al ser desarrollado en un proceso posterior en el cual se exponen las diversas capas que lo componen, permite observar cómo los neutrinos interactúan dentro del colisionador.
Estas seis interacciones identificadas son solo el comienzo de un proyecto más ambicioso que se llevará a cabo en el mismo Gran Colisionador de Hadrones, y con el cual los científicos esperan detectar más de mil interacciones de estas partículas esquivas.
El proyecto comenzará en 2022 y, de acuerdo con los investigadores del equipo FASER, los neutrinos serán “los de mayor energía que jamás han sido producidos por experimentos humanos”.
Por fortuna, el descubrimiento de estas partículas en el Gran Colisionador de Hadrones no puso en peligro al planeta Tierra.