Cuando son controlados y bien planeados, los derrumbes de edificios siempre representan un evento que todos quieren observar.
Por eso, la demolición en simultáneo de 15 edificios en China llamó la atención de los medios de comunicación y el público en general.
Ocurrió en la ciudad de Kunming, que fue testigo de cómo 15 rascacielos terminaban en el suelo en medio de poderosos estruendos y una impresionante nube de polvo.
El derribado fue un importante complejo residencial cuya construcción comenzó en 2011. Sin embargo, la empresa a cargo quebró dos años después, por lo que el proyecto nunca pudo ser terminado.
Debido a esto, las autoridades locales decidieron que había que echar abajo el complejo para que el lugar fuera ocupado por otros inmuebles.
Los preparativos de los derrumbes se extendieron por varios días e incluían desalojar a las personas que viven cerca del sector e inundar los cimientos de las estructuras con agua de lluvia.
La explosión en sí duró apenas algunos segundos, pero no resultó del todo exitosa, ya que un edificio en particular no terminó en el suelo.
This is the moment 15 unfinished buildings were demolished at the same time in southwestern China. The impressive video was filmed in the city of Kunming in Yunnan Province on August 27 [read more: https://t.co/QfkmBnk29d] pic.twitter.com/uLLRrls5LN
— Massimo (@Rainmaker1973) August 29, 2021
Al menos el derrumbe dejó varios registros que muestran lo impresionante que fue. De hecho, el evento pudo ser visto desde distintos puntos de la ciudad y reportes locales señalan que el estruendo se pudo escuchar a gran distancia del sector donde se provocaron las explosiones controladas.
#China 15 unfinished skyscrapers were blown up in #Kunming. The construction of the buildings, which began in 2011, did not continue because the construction company ran out of money in 2013. Few stories for those who make a mistake https://t.co/p8H0pOhUXE
— Donato Yaakov Secchi (@doyaksec) August 27, 2021
China tiene experiencia en esta materia, ya que en 2017 derrumbó 36 edificios al mismo tiempo en una operación controlada que apenas duró 20 segundos.