Un estudio publicado en Geophysical Research Letters menciona que la cantidad de calor que la atmósfera terrestre atrapa procedente del Sol se ha duplicado desde 2005.
“La magnitud a la que ha acelerado no tiene precedentes”, explica a The Washington Post el físico de la NASA y principal autor del estudio Norman Loeb.
“La Tierra se está calentando a un ritmo mucho más rápido de lo esperado”, agrega.
El equipo ha estudiado los datos satelitales que miden el equilibrio de calor en nuestra atmósfera. Es decir, la cantidad de calor que absorbe y la que irradia hacia el exterior.
Cuando esta cifra es positiva, significa que el planeta absorbe más calor del que es capaz de ventilar. Este es el primer paso hacia el efecto invernadero, el calentamiento global y otros efectos adversos, entre ellos la acidificación de los océanos.
Dicho en cifras, la Tierra absorbe 240 vatios de energía por metro cuadrado, energía que procede del Sol.
En 2005, el planeta irradiaba 239.5 vatios de vuelta al espacio. Para 2019, esa cantidad se ha doblado y así, en lugar de 0.5 vatios por metro cuadrado, acumulamos uno de desequilibrio. En tanto, 90 por ciento de esa energía la absorben los océanos.
“Es una cifra tan dura que cuesta entenderla”, explica Gregory Johnson, oceanógrafo del NOAA y coautor del estudio. “Es como si detonaran cuatro bombas atómicas de Hiroshima por segundo o como si de repente todos los habitantes del planeta encendieran 20 teteras eléctricas al mismo tiempo”.
Si bien los científicos están de acuerdo en que las actividades humanas son las principales responsables de este problema, aún se desconoce cuánto es nuestro porcentaje de culpa.