Una patente registrada por Apple indica que la compañía prueba mecanismos para hacer que Siri modifique el tono y volumen de sus mensajes en función del entorno del usuario.
De esta forma, el asistente inteligente de Apple podría susurrar o gritar al usuario según el contexto.
Algunos de los escenarios que podrían hacer uso de esta función es pedirle a Siri desde una bocina HomePod, que esté cerca del usuario, que programe una alarma. Si el usuario pide la instrucción en voz baja, Siri confirmará la acción con el mismo tono.
La patente detalla que la modulación contextual de voz se realizará a través de los procesadores del dispositivo, aunque también tomaría en cuenta condiciones como el ruido de una habitación, la ubicación del aparato y su distancia respecto del usuario.
Apple también podría echar mano de información contextual, como la hora el día o el volumen habitual con el que se le da una instrucción a Siri en diferentes momentos del día.
Hoy día la asistente Alexa de Amazon reconoce cuando un usuario le da una instrucción en voz alta o susurrando.
Según datos de la analítica Statista, Alexa y Google Assistant dominan el mercado de asistentes virtuales en bocinas inteligentes, con cuotas de preferencia de 31.7 y 31.4 por ciento respectivamente. Apple, en contraparte, apenas alcanza una proporción de 6 por ciento.
Cabe señalar que los asistentes inteligentes de Amazon y Google están presentes en bocinas de distintos fabricantes, mientras que Apple limita la presencia de su asistente Siri a dispositivos Apple.