Un metaanálisis efectuado por especialistas en Francia determinó que la hidroxicloroquina no es efectiva contra el nuevo coronavirus y, peor aún, dificulta la recuperación.
Tras revisar 29 estudios previos, los investigadores descubrieron que el uso combinado del fármaco con el antibiótico azitromicina se asocia con un aumento de la mortalidad del 27 por ciento.
«Estos resultados confirman los hallazgos preliminares de varios estudios observacionales que han demostrado que la combinación podría aumentar el riesgo de eventos cardiovasculares agudos que amenazan la vida», expusieron sobre la sustancia erigida como panacea por presidentes como el estadounidense Donald Trump y el brasileño Jair Bolsonaro.
El estudio se publica en Clinical Microbiology and Infection, la revista oficial de la Sociedad Europea de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas (Escmid), informó MedicalXpress.
Según los autores, «estos datos respaldan las recomendaciones clínicas actuales, como las de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, que desaconsejan el uso de hidroxicloroquina sola o combinada con azitromicina para pacientes con COVID-19».
Con toda la bibliografía existente, los responsables de la investigación plantearon que “parece poco probable que alguna vez surja alguna eficacia” en el tratamiento con la citada sustancia de la infección por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
Considerando que los ensayos clínicos fueron descontinuados por European DisCoveRy y la International Solidarity, ligada a la Organización Mundial de la Salud (OMS), “no hay necesidad de más estudios”, agregaron.
En este nuevo análisis, los autores buscaron estudios que evaluaran la cloroquina o hidroxicloroquina con o sin el antibiótico azitromicina. De esa manera, encontraron 29 artículos que cumplieron con sus criterios, todos excepto uno de los cuales fueron realizados en pacientes hospitalizados y evaluaron los efectos de la hidroxicloroquina con o sin azitromicina.
El metanálisis consideró 11,932 personas que recibieron solo hidroxicloroquina, 8,081 la mezcla con azitromicina y otros 12,930 como grupo de control. “En los dos primeros casos, los resultados no fueron estadísticamente significativos”, explicó MedicalXpress.
Según la misma fuente, la cloroquina se usa para prevenir y tratar la malaria, mientras que la hidroxicloroquina es un metabolito menos tóxico empleado para combatir enfermedades reumáticas como el lupus eritematoso sistémico (LES), la artritis reumatoide (AR), la artritis idiopática juvenil (AIJ) y el síndrome de Sjogren.
“La hidroxicloroquina, en particular, ha recibido una amplia cobertura mediática desde el brote de la pandemia del SARS-CoV-2 como posible tratamiento para el COVID-19. La azitromicina se usa para tratar una amplia gama de infecciones bacterianas, pero también se ha promovido como un tratamiento potencial para COVID-19 debido a sus supuestas propiedades antivirales o antiinflamatorias”, finalizó.