Los investigadores e ingenieros de Volkswagen están desarrollando vehículos eléctricos y tecnología autónoma. La compañía con sede en Wolfsburg, Alemania, se ha apartado del tradicional circuito automotriz para introducir (en silencio) un prototipo llamado Gen.E, el cual viene a mostrar sus avances en ambas áreas.
El Gen.E fue diseñado con la electrificación en mente desde el principio. Desafortunadamente, Volkswagen no está listo para darnos más información sobre su prototipo más nuevo. Están mostrando el vehículo sólo a ingenieros y científicos en Wolfsburg “para estos tengan una instantánea de temas estrictamente confidenciales», según un comunicado publicado online. Sin embargo, la breve información publicada por la marca es bastante prometedora.
El tren de propulsión eléctrico da al hatchback una autonomía de más de 250 millas por carga, lo que le permitiría competir de igual a igual con modelos tales como el Chevrolet Bolt y el Tesla Model 3. La batería que proporciona electricidad se integra en la plataforma de modo especial para que no se dañe en posibles accidentes, mientras que el motor eléctrico ha sido optimizado para proporcionar una mezcla de eficiencia y rendimiento. Si la plataforma está de alguna manera relacionada con la arquitectura modular MEB que Volkswagen está desarrollando actualmente para los modelos de producción, es algo que aún no podemos confirmar del todo.
En este sentido, uno de los proyectos secretos en los que trabajan los ingenieros es un robot autónomo que podría cargar a un carro eléctrico. En este punto, los detalles vuelven a ser fantásticamente vagos, pero la compañía dice que prevé un futuro en el que los robots móviles de cuatro ruedas serpentearán por los garajes recargando autos eléctricos.
Hay algo que decir sobre el diseño del Gen.E. Visualmente, toma señales de estilo del ultra eficiente XL1 construido en un número limitado y vendido a precio de supercar hace un par de años atrás, además de algunas señas en su carrocería que vagamente nos recuerdan a un Golf o un Polo. La séptima generación del Golf ha estado en producción desde 2012, y sabemos que llegará su reemplazo antes del cambio de década. Naturalmente, estamos tentados a decir que el Gen.E podría arrojar un poco de luz sobre lo que veremos en la octava generación del Golf… pero Volkswagen nos asegura que no es el caso.
«El vehículo en sí, en realidad, tiene una importancia secundaria, con sólo algunas características técnicas relacionadas con la carga rápida. Para ser claros: cualquier especulación con respecto a cualquier vehículo de producción relacionado con la marca, o con las intenciones de este tipo, son absolutamente insustanciales», dijo un portavoz de la compañía a Digital Trends.