Un dispositivo que conecta tu lengua con electricidad suena más como un método de tortura cruel e inusual que algo que te pueda hacer disfrutar. Pero en esta oportunidad, con el chicle eléctrico creado por investigadores de la Universidad Meiji en Japón, la experiencia es diferente. Los científicos japones han estado trabajando en una tecnología que han bautizado como «chicle eléctrico ilimitado», capaz de simular eléctricamente las sensaciones de sabor semejantes a cuando una persona mastica un chicle convencional. Los resultados hacen posible no solo que este chicle nunca pierde su sabor sino, al menos en teoría, también se abre la posibilidad de cambiar el sabor del chicle al instante y a voluntad.
Esto se logra utilizando algo llamado efecto piezoeléctrico, un fenómeno en el que ciertos materiales generan una carga eléctrica en respuesta a la tensión mecánica aplicada. En este caso, el efecto piezoeléctrico significa que cuando una pieza de la goma creada por estos investigadores (en realidad, un elemento piezoeléctrico y electrodos, envueltos en un plástico delgado) se mastica, se genera una pequeña corriente que engaña a la lengua de forma que experimente diferentes gustos.
Sin embargo, no deberías esperar tener un chicle eterno de clorofila en su boca. Cuando el dispositivo se probó en un evento en Japón a principios de este año, los sujetos de prueba informaron que el chicle tenía un sabor salado o amargo. Lo compararon con la experiencia de masticar niboshi, sardinas secas para lactantes que se comen con frecuencia como aperitivos o como condimento en caldos para sopas, así que imagina.
Los investigadores esperan que eventualmente puedan inducir sensaciones de sabor agrias, dulces y umami (un sabor sabroso que se encuentra en alimentos como los productos de soja fermentada, el queso y los hongos shiitake). La goma de mascar se presentó recientemente en el Simposio ACM sobre software y tecnología de interfaz de usuario en Alemania.
Tampoco es solo la Universidad Meiji la que se centra en crear este tipo de productos alimenticios simulados futuristas. La Dra. Nimesha Ranasinghe, actualmente directora del Laboratorio Multisensorial de Medios Interactivos en la Universidad de Maine, ha creado una serie de proyectos igualmente innovadores, que van desde una copa de cóctel programable hasta palillos futuristas capaces de simular el sabor mediante el uso de electrodos en su lengua.