Los dos terremotos registrados en Japón el jueves y sábado pasados tuvieron lugar en la parte sur de ese país.
Una de las áreas más afectadas fue la isla de Kyushu, donde Sony tiene su planta Kumamoto, que fabrica sensores. La fábrica estará cerrada mientras se revisan los posibles impactos del terremoto en la estructura.
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Esta fábrica es la que produce componentes para varios marcas de celulares, incluyendo a Apple.
Otra de las plantas en Nagasaki, también estará cerrada por el mismo motivo. Con esos cierres, la mitad de las plantas que producen ese tipo de sensores de Sony en Japón estarían cerradas.
El 40% del mercado de sensores de imágenes compuestos por semiconductores complementarios de óxido metálico (CMOS) está dominado por Sony.
Estos circuitos integrados convierten la luz en señales eléctricas y cuando son utilizados en teléfonos inteligentes, transforman las imágenes en información digital.
Son una parte crucial para construir celulares, así como cámaras digitales. Samsung afirma que como tiene una cadena de suministro tan diversa, la producción de sus teléfonos bandera no se verá afectada por el impacto de estos movimientos telúricos.
Sony se proyecta optimista en medio de la catástrofe y afirman que “no están esperando que se altere la cadena de suministros ya que tenemos un buen inventario”, dijo un vocero a Reuters el sábado pasado. “Si hay problemas de suministro haremos un anuncio inmediatamente”, añade.
El vocero afirmó que las operaciones continuarían, una vez se haga un avalúo del impacto de los terremotos. “Estamos revisando si hay daños en las plantas, que por lo general, operan las 24 horas del día”, afirma. Habrá más anuncios a lo largo de esta semana.
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El desastre también alteró la producción de grandes fabricantes de autos, quienes se vieron forzados a suspender la producción para inspeccionar posibles daños en las líneas. Entre ellos, se encuentras Honda, Mitsubishi, Nissan y Toyota.
La BBC reporta que 41 personas murieron durante los terremotos, y 11 continúan desaparecidas. Hubo cientos de heridos. 180,000 personas están en albergues y 62,000 casas están sin electricidad y otras 300,000 están sin agua.