Let´s Go Pikachu» es un buen juego de rol, pero Nintendo cobra extra por la mejor parte del juego.
Ventajas
•Simple y divertido
•La Pokébola lo hace más inmersivo
•Se sincroniza con Pokémon Go
Desventajas
•No es tan divertido sin la Poké Ball Plus
•No es muy profundo para los más fanáticos de la serie
Pokémon está en un lugar bastante peculiar en este momento. Por una parte, los queridos monstruos de bolsillo nunca han sido tan populares que después del inmenso éxito de Pokémon Go. Pero, por otro lado, una amplia franja de jugadores que aman a Pokémon no están familiarizados con los juegos de rol RPG (role playing game) de los que provienen.
Por eso, Let’s Go Pikachu, y su contraparte, Let’s Go Eevee, apuntan a cerrar esa brecha cambiando el estilo de las batallas por la mecánica de Pokémon Go. Como entrenador Pokémon, todavía luchas contra tus compañeros, pero ya no peleas contra las criaturas que te encuentras en el camino, sino simplemente debes atraparlas. Es un equilibrio interesante entre lo viejo y lo nuevo.
Inspirado en lo clásico y conectando lo novedoso
La mayor parte de Let’s Go Pikachu y Let’s Go Eevee está construida en base a los juegos Pokémon clásicos. Sigues explorando el mundo, atrapando Pokémon y formando un equipo de seis para batirte contra otros entrenadores. Let’s Go será un juego más fácil de abordar y comprender, y probablemente no te sentirás atrapado por la rutina de un clásico juego de rol.
Al igual que Pokémon Go en sus inicios, Let’s Go Pikachu atrae a los fanáticos que tienen una fuerte conexión con los juegos Pokémon originales y los dibujos animados. Como entrenador, debes explorar la región de Kanto, como en el Pokémon Rojo y Azul original, y atrapar a los 151 Pokémon originales. Dependiendo de la versión que elijas, tendrás un Pokémon primario, Pikachu o Eevee, que descansa sobre tu hombro y actúa como líder de tu formación.
Prepara tu brazo para “capturarlos a todos”
Capturar Pokémon en Let’s Go es un híbrido de los juegos de rol y Go originales. De inicio, los Pokémon emergen en el mundo abierto, como en los juegos tradicionales. Sin embargo, una vez que veas e interactúes con uno, ingresarás en una primera pantalla con un menú pequeño, muy similar a Pokémon Go.
Ambos juegos presentan un equilibrio interesante entre lo clásico y lo novedoso.
Para atrapar a un Pokémon, debes lanzar una Poké Ball. Sí, literalmente. Usando un Joy-Con o el nuevo accesorio Poké Ball Plus, debes físicamente mover el brazo y simular lanzar la pelota con un movimiento vertical.
Al igual que Go, un círculo delgado se aproxima desde la circunferencia del área que apuntaste, y lo ideal es tirar la esfera Poké a la derecha cuando el círculo se cierra en su centro. El color de la retícula, verde, amarillo o rojo, indica qué tan difícil será cazar al Pokémon.
Atrapar a un Pokémon no es difícil, pero hay cierta maña para hacerlo de una manera efectiva. Por ejemplo, si no mantienes el brazo recto, tu Poké Ball se desviará hacia un lado, o puede sobrepasar tu objetivo o no llegar hasta él, según cómo muevas el brazo. Los Pokémon más fuertes también pueden moverse para hacerte perder: Pidgey salta en el aire de vez en cuando, esquivando bolas Poké, y Butterfree vuela de un lado a otro, lo que te obliga a controlar activamente tus lanzamientos.
Capturar un Pokémon no es difícil, pero todo depende de la precisión con que lo hagas.
En la práctica, atrapar Pokémon se siente como una actividad predispuesta a la frustración en el momento en que las cosas se ponen realmente difíciles, pero la verdad es que se siente bien realizar físicamente movimientos para simular la experiencia. También creemos que capturar Pokémon sin batallas se adapta mejor al tema del juego que el combate más tradicional, donde los entrenadores deben pelear y golpear a las criaturas antes de capturarlas.
Poké Ball Plus: un complemento perfecto
La esfera Poké Ball Plus es, técnicamente, un accesorio opcional, pero completa de tal manera la experiencia, hasta el punto en que nos preguntamos si el juego mantendría nuestra atención por mucho tiempo sin ella.
El pequeño control en forma de esfera tiene una palanca analógica y dos botones. En Let’s Go Pikachu, debes presionar la palanca en lugar de presionar «A», y hay un botón en la parte superior de la bola para presionar «B». Además, puedes jugar el juego completamente con la Poké Ball Plus, no se requiere Joy-Con.
Las diferentes maneras de control convierten a Let’s Go Pikachu en una simulación de Pokémon que, al menos desde el punto de vista del juego, es más interesante que Pokémon Go. Mover un Joy-Con arriba o abajo para lanzar una Poké Ball se siente fluido, pero teniendo una Poké Ball en la mano, automáticamente puedes lanzar la pelota en cada intento.
También mejora la experiencia de juego con algunos pequeños detalles. Cuando atrapas con éxito un Pokémon, la Poké Ball hace clic, y puedes escuchar un pequeño grito del Pokémon que ahora tienes dentro.
La bola se conecta también con Pokémon Go y deberías tenerla contigo todo el tiempo.
Duplicando la diversión
La experiencia podría ser aún más completa si juegas el juego junto con Pokémon Go. La Poké Ball se conecta a ambos juegos, dándote la capacidad de cargar y subir de nivel a un Pokémon sin jugar. También te da la posibilidad de transferir Pokémon Go a Let’s Go Pikachu, o viceversa. Es una buena forma de hacer de Pokémon parte de tu vida cotidiana, fuera de los juegos, si así lo deseas.
Sin embargo, dudamos en que muchos decidan llevar un control con un dispositivo analógico en el bolsillo día a día, por temor a romperlo. Además, a $50 dólares cada uno, o como parte de un paquete de $100 dólares con el juego, es un precio algo elevado para pagar solo para disfrutar un poco de inmersión adicional. De todas formas, para los fanáticos de siempre, Let’s Go Pikachu es un equilibrio interesante entre lo viejo y lo nuevo.
Let’s Go Pikachu, Let’s Go Eevee, y el Poké Ball Plus llegarán al Nintendo Switch el 16 de noviembre.
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