“Con todo lo bueno del modelo Watch GT 2 en tecnología, y el diseño de la firma alemana de autos, esta es una apuesta segura, siempre que estés dispuesto a pagar por ella.”
- Diseño exclusivo
- Elegante y resistente
- Pantalla AMOLED
- Sencillez de uso
- Autonomía
- El cierre de la correa puede darte algún susto
La colaboración de Huawei y Porsche Design viene de lejos, tanto en la serie de teléfonos Mate –cuya última criatura es el Huawei Mate 40 RS Porsche Design– como en relojes inteligentes, con el Watch GT 2 Porsche Design, un dispositivo con lo esencial del GT 2 Pro que analizamos en esta review, pero con el diseño de lujo que posee todo aquello que toca Porsche Design. Como otros productos inspirados en los autos del fabricante alemán, es un modelo exclusivo, con el refinamiento como máximo atractivo.
Titanio puro: tan elegante como resistente
Si el GT 2 Pro ya se sentía un reloj premium, en este caso se eleva a le enésima potencia. Un primer vistazo es suficiente para darse cuenta de que se trata de un dispositivo con una calidad suprema. ¿El gran artífice de esta atracción? El titanio puro de la caja y de la correa que le da un color plateado mate superelegante. Esta es la principal diferencia con la versión normal del reloj de Huawei.
Nada más sacarlo de la caja, toca ajustar la medida de la correa. Es un proceso sencillo, no es necesario llevarlo a un relojero para adaptarlo a las dimensiones de la muñeca. Cada eslabón cuenta con un sistema independiente de anclaje y eso facilita mucho este paso. Esta correa resulta muy suave. Una vez ajustada resulta muy cómoda, se abrocha y desabrocha sin problemas con una hebilla clásica. Eso sí, debes asegurarte bien de que suena el clic cuando la cierras, si no la correa puede quedar desprendida sin que te percates de ello (en mi caso con suerte porque al llevar el jersey no se ha salido de la muñeca, con el peligro que esto supone). Para que puedas cambiar de correa según tus necesidades o gustos, en la caja incluye una correa negra de una goma muy suave y que le da otro aspecto más informal y queda también muy atractiva en contraste con el tono plateado.
El titanio se siente resistente y ligero. No me ha pesado en la muñeca pese a su gran tamaño. Por la parte trasera, el reloj está acabado con cerámica, igual que el GT 2 Pro, un material antialérgico con el que se quieren evitar las irritaciones de la piel.
La pantalla táctil con tecnología AMOLED mantiene las 1.39 pulgadas y el cristal de zafiro (a prueba de arañazos y rayaduras) habitual en los relojes convencionales. Es otra de las grandes bazas de este dispositivo: con este tamaño todo se muestra a lo grande, y con una viveza de colores muy agradable. A la vez, responde rapidísimo a los movimientos del dedo. Para activar la pantalla y desplazarse por las distintas funciones también trae dos botones físicos, los mismos pulsadores que el modelo Pro solo que en este caso adornados con una sutil raya roja. Otras de las pequeñas grandes diferencias son las letras de Porsche Design impresas arriba de la caja y los marcadores de las horas (sin numeración y con los cuartos y la media con un triángulo rojo).
Como reloj diseñado por Porsche Design, entre las esferas disponibles para cargar viene con cinco específicas del fabricante de autos (simple, minimalista, carrera, extremo y cronógrafo). Todas mezclan los tonos negro, rojo, blanco y gris, a conjunto con la estética exterior del dispositivo.
La misma experiencia de uso
Excepto por las esferas y los iconos de las funciones (de color rojo), el reloj por dentro es igual que la versión Pro en cuanto a prestaciones. Monitoriza más de cien actividades, mide parámetros de salud como la frecuencia cardiaca, el sueño y nivel de estrés, entre otros. Puedes utilizarlo como disparador para tomar fotos con tu smartphone, para leer los mensajes de WhatsApp —aunque no los puedes contestar como en otros relojes inteligentes—, para reproducir música (almacenada en el dispositivo) y para buscar el teléfono, entre otras opciones que ya analizamos en el modelo Pro (si quieres profundizar aquí tienes de nuevo el enlace a la review).
En autonomía tampoco presenta diferencias con el Pro. Me ha durado lo mismo (más de ocho días poniendo el GPS cuatro de ellos, durante una hora aproximadamente). Igualmente se recarga por completo en menos poco menos de dos horas (115 minutos), a la mitad en 47 minutos. La base inalámbrica y el cable USB para cargarlo son negros y por eso resultan mucho más elegantes que los de color blanco del Pro.
Conclusión
Cuando lo vi por primera vez, la palabra que me vino a la cabeza fue “wow”. Fue un flechazo: enamora su estética refinada, moderna y minimalista. Se ve y se siente de lujo como manda un producto exclusivo. Estas características se traducen en un precio elevado, —supone más del doble de la versión Pro—. Si bien es una cantidad considerable no apta para todos los bolsillos, al menos es mucho más económico que los relojes de lujo clásicos.
Me gusta mucho también porque es un dispositivo muy sencillo de utilizar, a través de un menú principal presentado como una lista, los dos pulsadores situados a la derecha y la agradable pantalla táctil. A esto se le suma una de las mejores autonomías del mercado, realmente te olvidas de cargarlo por muchos días con un uso medio.
En mi experiencia con el Huawei Watch GT 2 Porsche Design, el cierre de la correa ha cumplido su misión sin problemas. Sin embargo, en los primeros días sí que me encontré que estaba abierta cuando pensaba que quedó bien cerrada. No llegó a salirse de mi muñeca, pero me di cuenta de que si no te aseguras de apretar bien para que esté bien abrochada (suena un clic) puedes llevarte un susto si se te cae al suelo.
Si fuera el reloj GT 2 Pro, se mediría cara a cara en diseño con el Samsung Galaxy Watch 3, pero al ser un producto de lujo para un usuario muy concreto, también puedes considerar el modelo Montblanc Summit 2+ con un precio poco mayor que el de Huawei. Si dispones de más presupuesto, el TAG Heuer Connected cuesta el doble, y si no tienes límite de gasto, Hublot Big Bang e vale siete veces más.