Mientras que a primera vista parece que ya está completamente terminado, una inspección más cercana revela que el trabajo todavía continúa en varias áreas alrededor del sitio. La mayor actividad se hace visible en el teatro de Steve Jobs, el auditorio subterráneo de mil asientos de la compañía, que presenta un cilindro de cristal de 20 pies de altura y 165 pies de diámetro, soportando un techo metálico de fibra de carbono.
Se espera que los empleados de Apple empiecen a trasladarse al edificio principal del complejo, que tiene forma circular y que está envuelto en gigantescas secciones de vidrio curvado. Además, está cubierto con paneles solares que ayudarán a proveer energía para el campus. Se espera que el proceso de traslado de los 12.000 trabajadores al nuevo sitio dure alrededor de seis meses.
Además del edificio principal y el teatro, la nueva base del gigante de la tecnología incluye un gimnasio de 100.000 pies cuadrados para mantener el equipo de Apple en la mejor forma, un centro de investigación y desarrollo donde Jony Ive y su equipo se esforzarán por crear el próximo gran éxito de la compañía, y extensos parques y áreas verdes.
Apple afirma que su nueva sede es el edificio más grande del mundo con ventilación natural y por lo tanto no se espera que requieran calefacción o aire acondicionado durante nueve meses del año.
«La visión de Steve para Apple se extendió mucho más allá de su tiempo con nosotros», dijo el jefe de Apple, Tim Cook, en un comunicado a principios de este año. «Pensaba que Apple Park sería el hogar de la innovación para las generaciones venideras. Los espacios de trabajo y parques están diseñados para inspirar a nuestro equipo, así como para el medio ambiente. Hemos logrado uno de los edificios más eficientes desde el punto de vista energético en el mundo, y el campus funcionará enteramente con energía renovable».
Los fans de la empresa, o aquellos con un interés en la impresionante arquitectura moderna, están invitados a pasar por el centro de visitas de Apple Park, que, como era de esperarse, incluye una tienda de Apple, así como una cafetería.
El diseño de Apple Park es obra del aclamado arquitecto Norman Foster, aunque fue el mismo Steve Jobs quien impulsó el ambicioso proyecto en los años y meses previos a su fallecimiento en el 2011.