La compañía que se hace llamar BioShield Distribution está haciendo una agresiva campaña de venta en el Reino Unido de memorias USB que, según su propia versión, son anti-5G.
Esta empresa asegura en sus anuncios que el dispositivo «proporciona protección para tu hogar y familia, gracias al catalizador de nanocapa holográfica portátil. A través de un proceso de oscilación cuántica, el USB 5GBioShield vuelve a armonizar las frecuencias perturbadoras que surgen de la niebla eléctrica inducida por dispositivos, como computadoras portátiles, teléfonos inalámbricos».
Por eso, más agresiva ha sido la respuesta de las autoridades británicas, que comenzaron una persecución para detener la venta fraudulenta de estos dispositivos, que tienen un valor equivalente a $349 dólares.
La oficina de Normas Comerciales de Londres y la policía de la Ciudad de Londres están advirtiendo sobre estas USB a los consumidores, puesto que «no son más que memorias básicas».
«Consideramos que es una estafa», dijo a la BBC Stephen Knight, director de operaciones de London Trading Standards.
«Las personas vulnerables necesitan protección contra este tipo de comercio sin escrúpulos», agregó el funcionario de la oficina de normas comerciales.
Tras desarmar el USB anti-5G Pen Test Partners, una compañía que desarma la electrónica de consumo para evaluar las vulnerabilidades de seguridad, descubrió que no había nada fuera de lo común en la llave USB.
«A primera vista, parece ser solo una memoria USB, con solo 128 MB de almacenamiento. Entonces, ¿qué hay de diferente entre esta memoria y una llave USB ‘crystal’ prácticamente idéntica disponible de varios proveedores en Shenzhen, China?» pregunta Ken Munro, de Pen Test Partners y la respuesta es, «no somos expertos cuánticos en 5G, pero el adhesivo que tiene se parece mucho a uno disponible en hojas de proveedores de papelería por menos de un centavo cada uno».
Además, para analizar este USB anti-5G en Reino Unido se formó un Comité Asesor 5G de Glastonbury, que participó de las discusiones sobre su llegada al mercado inglés.
«Me uní al grupo de trabajo de buena fe, esperando participar en una discusión sensata sobre 5G. Lamentablemente, todo resultó ser una pantomima despistada impulsada por teóricos de la conspiración y escépticos», dijo Mark Swann, una de las personas que se ofrecieron como voluntarios para ayudar a compilar el informe.