¿Sería Usain Bolt más rápido que un dinosaurio de 900 libras (408 kg), como uno de los que aparecen en la saga Jurassic Park?
La curiosa interrogante no la planteó nadie que estuviese bajos los efectos de alguna sustancia potente, sino Scott Lee, un profesor de la Universidad de Toledo (Estados Unidos), a sus estudiantes de física.
La idea era que los alumnos aplicasen los conceptos básicos de la cinemática 1D, que son la posición, la velocidad y la aceleración de un cuerpo.
Mediante hojas de cálculo, los alumnos serían capaces de determinar si el retirado plusmarquista jamaicano podría vencer a un animal prehistórico en una carrera de 100 metros, planteó el sitio Phys.org.
El educador contó que “un gran problema en la enseñanza de la física es generar el entusiasmo de los estudiantes por el contenido de la clase. Estos problemas de dinosaurios realmente despiertan mucho interés”.
Familiarizado de pequeño con la búsqueda de fósiles, el descubrimiento de un libro sobre la física del movimiento de los dinosaurios lo motivó a desarrollar un curso de formación general sobre los extintos reptiles para alumnos universitarios.
Al descartar de entrada al lento Tyrannosaurus rex, el profesor puso en la línea de largada al Dilophosaurus wetherilli, cuyo desempeño podría equipararse al de Usain Bolt, quien al cierre de esta edición ostentaba el récord mundial en las pruebas de 100 y 200 metros planos.
“La actividad incluyó un debate sobre la segunda ley de Newton, según la cual la aceleración viene determinada por una combinación de masa y fuerza. Ser más pequeño, por ejemplo, da a Bolt una ventaja inicial”, sugirió el medio.
Es justamente la mezcla de dicho principio con su capacidad de aceleración la que le otorgaría por 2.0 segundos el triunfo al competidor humano.
Los resultados del análisis fueron publicados en la revista científica The Physics Teacher, de AIP Publishing.