¿Dónde está Sergey Brin? El excofundador de Google y octava persona más rica del mundo, según el conteo de Forbes al cierre de la edición de esta nota, sigue siendo uno de los principales accionistas de Alphabet —la empresa matriz de Google— y se le vio muy activo en la última I/O, la conferencia para desarrolladores en la que suelen mostrarse algunas de las novedades que llegarán a Android.
Pero Sergey Brin está más o menos retirado de la vida empresarial. El boom de la inteligencia artificial lo “sacó” de su retiro dorado (“Estaba jubilado, pero al ser un científico informático quería ser parte de esto”, dijo a EFE), pero a diferencia de otros fundadores tecnólogos como Mark Zuckerberg o Elon Musk, Brin está más bien dedicado a la filantropía, especialmente a la médica.
Sergey Brin después de Google
Brin fundó Google junto a Larry Page en 1998, a quien conoció en la Universidad de Stanford cuando ambos estudiaban ciencias de la computación. Luego de convertir Google en una de las empresas clave del siglo XXI, Brin dejó la presidencia de Alphabet en diciembre de 2019. Y aunque permanece en la mesa directiva de la compañía y sigue siendo un accionista mayoritario, Brin está más o menos retirado.
Entonces, ¿dónde está Sergey Brin? Con una fortuna valuada en $143 mil millones de dólares, Brin puede irse a pensar en el transhumanismo en su yate de 142 metros de largo (no cabría en la mayoría de los estadios deportivos del mundo), un retiro que nos parece fabuloso después de un divorcio que involucró una presunta infidelidad con Elon Musk.
Sin embargo, cuando Brin no está disfrutando del fabuloso lujo que es el ocio, está donando miles de millones de dólares a empresas que investigan enfermedades o condiciones que afectan a sus personas más cercanas o incluso, probablemente a él mismo.
Está, por ejemplo, la iniciativa ARIA, siglas de Aligning Research to Impact Autism. Brin ha sido extremadamente discreto con su vida privada, pero su exesposa, Nicole Shanahan, fue sumamente vocal en que la hija de ambos está diagnosticada con autismo.
Otra de las iniciativas filantrópicas que está en la cabeza de Brin es la enfermedad de Parkinson. Según información de Forbes, Brin ha donado cerca de $1.1 mil millones de dólares a la investigación de esta enfermedad, de la que Brin posee uno de los genes asociado a su desarrollo. La madre de Brin tenía Parkinson y murió en diciembre pasado.
Pero, ¿por qué Brin está tan interesado en invertir en enfermedades o condiciones neurológicas? “Es un trabajo personal porque empieza con la enfermedad de Parkinson, yo tengo una de las mutaciones recientemente descubiertas”, dijo por correo electrónico a Forbes. “Soy optimista en que descubrimientos como este ayudarán a mejorar la vida de personas con autismo”, agregó.