Un equipo de investigadores de la Universidad de Bath, en Inglaterra, elaboró un modelo matemático que explica cómo el pez cebra desarrolla sus rayas características.
Esta especie es de gran relevancia para estudiar las enfermedades humanas, destacó el sitio de la casa de estudios.
El pez cebra posee muchas semejanzas genéticas con los seres humanos y cuenta con características físicas muy parecidas, incluso dispone de la mayoría de los órganos principales que se encuentran en nuestro cuerpo, destaca la publicación.
“El pez cebra también proporciona información fundamental sobre los complejos y, a menudo, maravillosos procesos que sustentan la biología. Estudiar su aspecto llamativo puede, con el tiempo, ser relevante para la medicina, ya que la formación de patrones es una característica general importante del desarrollo de los órganos”, señala el estudio.
“¿Por qué es importante para nosotros encontrar un modelo matemático correcto para explicar las rayas en el pez cebra? Porque estas rayas son un ejemplo de un proceso de desarrollo clave. Si podemos entender lo que está sucediendo en el desarrollo del patrón de un embrión de pez, podemos ser capaces de obtener una visión más profunda de la coreografía compleja de células dentro de embriones en general”, destaca el profesor Robert Kelsh, coautor del estudio.
Las rayas de un pez cebra adulto de tipo salvaje se forman a partir de células que contienen unos pigmentos llamados cromatóforos.
Existen tres tipos diferentes de cromatóforos en los peces y a medida que el animal se desarrolla, estas células pigmentarias se mueven alrededor de la superficie del animal, interactuando entre sí y auto organizándose para brindar al pez el patrón de rayas que hace característico a este tipo de peces.
Ocasionalmente, aparecen mutaciones que cambian la forma en que las células interactúan entre sí durante el desarrollo del patrón, lo que da como resultado manchas parecidas a la forma de los laberintos o a la piel del leopardo.