Un artículo de The New York Times publicado en diciembre de 2020 acusaba gravemente a Pornhub de permitir la publicación de videos que incentivaban la explotación infantil y otro tipo de contenido ilegal en su sitio.
Ahora, la plataforma de videos para adultos ha anunciado las medidas adoptadas para enfrentar el escándalo, entre ellas, la contratación de una empresa externa denominada Yoti, que verificará las identidades de los usuarios que suben contenidos.
Cuando se publicó el reportaje, el sitio prohibió todos los videos subidos por usuarios no verificados, además de impedir la descarga de contenido.
Como segunda medida, eliminó millones de registros que habían sido cargados por usuarios no conocidos.
Medidas más estrictas
Desde ahora, cualquiera que desee subir contenido al sitio deberá verificar su identidad a través de Yoti. Para esto, los solicitantes tendrán que presentar una foto actual y un documento de identidad aprobado por el gobierno.
Yoti explicó que solo podrá ver los datos enviados durante un máximo de siete días, mientras comprueba que la fotografía coincide con la identificación gubernamental mediante un software de reconocimiento facial.
Luego de este procedimiento, encriptará la información de tal manera que la propia empresa no podrá volver a verla.
Además, Pornhub aseguró que su empresa matriz “ampliará sus esfuerzos” con moderadores humanos, que estarán dedicados a revisar cada uno de los contenidos subidos.
Por último, la plataforma ha lanzado Trusted Flagger Program, un iniciativa que ofrece a 40 organizaciones sin fines de lucro dedicadas a la seguridad infantil en la web, la posibilidad de marcar cualquier contenido que consideren que viola las condiciones de servicio del sitio web.