Un estudio realizado por la Universidad de Exeter, en el Reino Unido, comprobó la existencia de varias cuevas secretas en Chipre que son utilizadas por las focas monje del Mediterráneo para reproducirse.
Los investigadores pudieron estudiar ocho cuevas a lo largo de la costa de aquel país durante un periodo de 1,619 días. En ese tiempo pudieron reportar el nacimiento de al menos tres crías en una de las grutas analizadas.
Es una noticia positiva, más si se tiene en cuenta que la foca monje es uno de los mamíferos marinos más amenazados en el mundo, con una población que apenas alcanza los 700 individuos en estado silvestre.
El llamado de los investigadores es proteger estos valiosos lugares de reproducción, que corren el riesgo de desaparecer si no se adoptan medidas urgentes.
“Esta zona de la costa se está desarrollando con rapidez, en especial para la construcción de hoteles”, dijo en un comunicado el doctor Robin Snape, del Centro de Ecología y Conservación de la Universidad de Exeter.
“El principal sitio de reproducción que identificamos en el estudio actualmente no tiene un estatus protegido y estamos trabajando con las autoridades locales para tratar de cambiar eso”.
El mismo Snape afirmó que en un estudio sobre la costa de Chipre, de 2007, halló 39 posibles cuevas de reproducción. Sin embargo, muchos de esos lugares se encuentran destruidos en la actualidad.
De acuerdo con los propios investigadores, la amenaza principal para las focas monje en este lugar es la captura accidental por parte de las pesquerías.