Estados Unidos rechazó las solicitudes que exigían que se regule o prohíba la utilización de los sistemas de armas autónomas letales, también conocidos como “robots asesinos”.
Durante una reunión de las Naciones Unidas celebrada en Ginebra, un funcionero de Estados Unidos rechazó la idea de regular su uso a través de un instrumento jurídicamente vinculante.
“En nuestra opinión, la mejor manera de avanzar en nuestra reflexión sería desarrollar un código de conducta no vinculante”, afirmó Josh Dorosin, consejero jurídico del departamento de Estado.
“Este código ayudaría a los Estados a promover un comportamiento responsable y el respeto del derecho internacional”.
Desde 2017, la ONU realiza en Ginebra reuniones que buscan llegar a un acuerdo sobre cómo abordar el uso de estos robots asesinos.
En el último tiempo, varios activistas y distintas organizaciones han exigido la prohibición de cualquier arma que pueda usar fuerza letal sin la supervisión de un ser humano.
En 2018, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, se sumó a la petición de prohibición, sin embargo, hasta el momento ninguno de los países se ha puesto de acuerdo sobre la regulación de estas armas.
“Los Estados tienen una oportunidad histórica de garantizar un control humano significativo sobre el uso de la fuerza y evitar un mundo en el que las máquinas tomen decisiones de vida o muerte”, afirmó Clare Conboy, de la Campaña para Detener los Robots Asesinos, en una nota de The Guardian.
Por su parte, mediante un comunicado, Human Rights Watch señaló que “un proceso independiente para negociar una nueva ley sobre los robots asesinos sería más eficaz e inclusivo que las actuales conversaciones diplomáticas”.