Algo tienen los magnates del área tecnológica con la idea de volar. A los ya conocidos esfuerzos de Elon Musk y Jezz Bezos, de permitir la exploración espacial, se suma el proyecto de otro empresario.
Se trata de Sergey Brin, cofundador de Google, cuya empresa de aeronaves pretende alimentar una aeronave enorme con una pila de combustible de hidrógeno.
Eso sí, a diferencia de Musk y Bezos, lo que Brin buscaría con esto es entregar ayuda humanitaria.
Para eso, su empresa LTA Research and Exploration quiere configurar un sistema de propulsión de hidrógeno de 1.5 megavatios para que la aeronave, estilo dirigible, sea lo suficientemente potente como para cruzar los océanos.
Además, su proyecto puede marcar un hito, ya que, hasta el momento, la mayor pila de combustible de hidrógeno que ha volado es un sistema de 0.25 megavatios.
Así, el primer prototipo de aeronave tripulada de LTA se llamará Pathfinder 1 y funcionará con baterías cuando salga al aire, probablemente este año.
Pathfinder 1 cuenta con 12 motores eléctricos y podría transportar a 14 personas. Tendría el mismo tamaño que el único dirigible de pasajeros que opera en la actualidad, el Zeppelin NT.
Brin es la novena persona más rica del mundo con un patrimonio neto de más de 86 mil millones de dólares.
Según el sitio web de su empresa LTA, el uso inicial de su aeronave será “la respuesta a desastres humanitarios y los esfuerzos de socorro, especialmente en áreas remotas a las que no se puede acceder fácilmente por avión y barco debido a la infraestructura limitada o destruida”.