El coronavirus y la incapacidad durante buena parte del año de poder asistir a las escuelas, ha hecho que en Reino Unido se haya tomado una determinación muy polémica que tiene en problemas a la comunidad educativa.
Resulta que todos los años se desarrolla el examen A-Levels, conocidos como las pruebas finales de la secundaria, sin embargo, por la contingencia de la pandemia, este 2020 el gobierno decidió que un algoritmo colocara las calificaciones.
El principal problema del algoritmo, es que además de las notas colocadas por los docentes, tomó en cuenta el historial del centro educativo y el lugar geográfico donde se encuentra, además de sus condiciones socioeconómicas.
Eso gatilló que al menos 300,000 alumnos vieran disminuidas sus notas reales en un 40%, perdiendo el acceso a las universidades.
Esto provocó la molestia de los estudiantes que salieron a protestar a las calles. En un vídeo publicado por Carole Cadwalladr (periodista en The Guardian), sale un grupo de adolescentes protestando al grito de ‘Fuck the algorithm’:
This is amazing. The future is here.
‘Fuck the algorithm’
pic.twitter.com/k4Vny0L4tF— Carole Cadwalladr (@carolecadwalla) August 17, 2020
Dentro del grupo de alumnos perjudicados, han reclamado que si, por ejemplo, obtuvieron un A de calificación, esta bajó al menos un grado con el algoritmo.
my sister got her a-level results today! Her mock results were AAA, her centre assessed results were A*,A,A* which she 100% deserves yet because of clever Boris’ algorithm she’s ended up with BBC … HOW do you come to that result when NONE of her work has ever been graded that pic.twitter.com/yedAUl3LVc
— emily kate pettite (@emilypettite) August 13, 2020
Ante las protestas, la Primera Ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, ha decidido anular los resultados y permitir que los alumnos utilicen las calificaciones que habían previsto sus profesores.
Robert Halfon, presidente del Comité de Selección de Educación, dijo a la BBC que «sembrar la confusión entre los alumnos, directores y profesores de escuela es lo último que necesitamos en este momento».
Esto ha llevado a la Oficina de Regulación de Calificaciones y Exámenes a cambiar de opinión. Finalmente se permitirá que los estudiantes puedan recurrir sus calificaciones utilizando las notas previstas por sus profesores.