Las abejas podrían detectar un caso de coronavirus en solo unos segundos.
Investigadores de la Universidad de Wageningen realizaron un estudio con 150 abejas para demostrar que estos inteligentes insectos son capaces de “oler” el virus en un sujeto infectado. Los científicos entrenaron a las abejas del siguiente modo: las exponían al olor de un visón con COVID-19 y les daban una solución de agua y azúcar para reforzar el estimulo; si las abejas estaban expuestas a una muestra no infectada, no obtenían dicha recompensa.
Este tipo de condicionamiento estímulo-respuesta demostró que, eventualmente, las abejas podrían identificar una muestra infectada en unos pocos segundos. Debemos señalar que las abejas no son capaces de oler en el sentido estricto de la palabra, sino que gracias a unos receptores localizados en sus antenas pueden detectar compuestos volátiles, como los segregados por los pacientes con COVID-19.
Las abejas no son los primeros animales entrenados para detectar el COVID-19. Un estudio reciente sugiere que los perros pueden identificar casos positivos de la enfermedad con una precisión de 96 por ciento. Varios animales fueron adiestrados para distinguir entre muestras de COVID-19 positivas de la saliva o el sudor de humanos.
Sin embargo, aunque el nivel de precisión de los animales es alto, los investigadores no tienen del todo claro que estos sean la mejor opción para detectar casos de COVID-19 fuera del laboratorio.
“Nadie dice que puedan reemplazar un test de PCR, pero podrían ser de mucha ayuda”, dijo a la revista Nature Holger Volk, neurólogo veterinario.