A través de un comunicado publicado por Reuters, se confirma la noticia de la demanda a Twitter por parte Tamara Fields, la viuda de un estadounidense que murió en un ataque en Jordania el pasado 9 de noviembre. La misma acusa a la red social de hacer más fácil para el grupo radical del Estado Islámico difundir sus ideas usando el sitio de mensajes.
Cuando vemos este tipo de noticias o simplemente pensamos en el rol que las redes sociales juegan hoy en día en la sociedades, para bien o para mal, se nos hace difícil contestar de manera satisfactoria la pregunta de hasta dónde se debe limitar la libertad de expresión en el mundo web.
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La web es ahora una plataforma accesible para una proporción significativa de la población mundial, y se ha convertido en el lugar ideal donde se pueden expresar una gran variedad de puntos de vista. Y en manos expertas, se ha convertido en un medio increíblemente poderoso a través del cual la propaganda radical puede difundirse rápidamente.
ISIS ha usado todos los medios y herramientas posibles para continuar su expansión internacional. Sin duda que la web les ha dado un poder especial para conectarse con otras personas y grupos que se ven identificados con sus objetivos. Lo han usado todo, YouTube, Facebook y Twitter, no sólo para propagar sus ideas, sino también para reclutar aspirantes a terroristas.
Ahora Fields alega que Twitter no sólo ha dado el Estado Islámico una voz, pero sin duda un micrófono para opiniones peligrosas y mortales. Fields comenta, “Sin Twitter, el explosivo crecimiento de ISIS en los últimos años para convertirse en el grupo terrorista más temido del mundo no hubiera sido posible”.
El ataque se produjo el 9 de noviembre, en la que un hombre armado abrió fuego en un centro de formación de la policía internacional en Jordania, matando a cinco personas, entre ellas, el contratista de 46 años de edad, Lloyd Carl Campos, Jr., esposo de la demandante.
Es válido decir que ISIS ha logrado utilizar las redes de manera eficiente. Un análisis publicado por el Instituto Brookings, en marzo del año pasado estimó que “al menos 46.000 cuentas de Twitter fueron utilizadas por los partidarios de ISIS”, esta cifra representa un “estimación conservadora”. Las estimaciones de máxima, según el Instituto señalan que “se encuentra en 70.000 cuentas” registradas.
El abogado de Fields dijo que este es el primer caso donde se demanda a una red social por violar la Ley Antiterrorismo.
En un comunicado de Twitter, la empresa señala, “Si bien creemos que la demanda no tiene méritos, nos entristece mucho saber de la terrible pérdida de esta familia”. También agregan que este tipo de uso o comportamiento en la red social no tiene cabida. “Las amenazas violentas y la difusión del terrorismo no tienen lugar en Twitter y, como otras redes sociales, nuestras reglas lo dejan en claro”.
