En una política traída desde los albores del imperio Romano, y con un entendimiento de la democracia bastante básico (se hace lo que dice la mayoría), pero en una plataforma muy cuestionada por su legitimidad democrática como X (ex Twitter), por la cantidad de mentiras, spam, trolls y odiosidad en línea, Elon Musk está reconstruyendo su imperio devolviendo a viejos enemigos de la libertad de expresión.
El también dueño de Tesla ha restaurado la cuenta X del teórico de la conspiración Alex Jones, señalando una encuesta en la plataforma de redes sociales anteriormente conocida como Twitter que salió a favor del presentador de Infowars que calificó repetidamente el tiroteo en la escuela Sandy Hook de 2012 como un engaño.
«Hay que escuchar la voz del pueblo»
Elon Musk publicó una encuesta el sábado preguntando si Jones debería ser reincorporado, y los resultados mostraron que el 70% de los que respondieron a favor. A primera hora del domingo, Musk tuiteó: «El pueblo ha hablado y así será».
Unas horas más tarde, las publicaciones de Jones volvieron a ser visibles y retuiteó una publicación sobre su videojuego. Él y su programa Infowars habían sido prohibidos permanentemente en 2018 por comportamiento abusivo.
En respuesta a un usuario que publicó que «las prohibiciones permanentes de cuentas son la antítesis de la libertad de expresión», Musk escribió: «Me resulta difícil estar en desacuerdo con este punto».
El multimillonario CEO de Tesla también tuiteó que es probable que Community Notes, el servicio de verificación de hechos de X, «responda rápidamente a cualquier publicación de AJ que necesite corrección».
Lo cierto es que Elon Musk realmente no cree en la libertad de expresión y menos en la necesidad de crear un ambiente sano de convivencia para la democracia, ya que indultar a un provocador y negacionista, más bien genera una apertura de discursos de odio y de extremismo que no construye relaciones sociales.
Un paso más en falso, para una plataforma que sigue desprestigiándose.