La multinacional Johnson & Johnson ha anunciado que detuvo los ensayos de su vacuna para el COVID-19 debido a la aparición de una “enfermedad inexplicable” en uno de los participantes.
“Hemos detenido temporalmente la administración de nuevas dosis en todos nuestros ensayos clínicos de la vacuna contra el COVID-19, incluyendo el ensayo de fase 3, debido a una enfermedad inexplicable en un participante del estudio”, señaló la compañía mediante un comunicado.
La enfermedad del participante está siendo revisada y evaluada por la Junta de Monitoreo de Seguridad de Datos (DSMB) independiente de ENSEMBLE (nombre del estudio), además de sus médicos.
Con el fin de respetar la privacidad del participante, la farmacéutica ha declinado entregar más detalles sobre la persona que se ha visto afectada con esta enfermedad.
“Estamos aprendiendo más sobre la enfermedad de este participante y es importante tener todos los datos antes de compartir información adicional”, agrega el comunicado.
De todas formas, desde la empresa han explicado que un evento de este tipo puede ser considerado esperable cuando se realiza una prueba de forma tan masiva.
“Los eventos adversos (enfermedades, accidentes, etc.), incluso los que son graves, son una parte esperada de cualquier estudio clínico, especialmente los estudios grandes”, señalan.
El concepto de “enfermedad inexplicable”, hace referencia al hecho de que los encargados del estudio aún no han encontrado un diagnóstico para las dolencias que sufre la persona afectada, situación que podría demorar algunos días.
El ensayo de la vacuna para el COVID-19 de Johnson & Johnson tiene unos 60 mil participantes en todo el mundo.