Como una forma de facilitar la adaptación a la llamada “nueva normalidad” que está aparejada a la pandemia del coronavirus, una compañía japonesa desarrolló Mask-C, una mascarilla inteligente que no solo evita la propagación de la enfermedad, sino que además traducirá a nueve idiomas.
Gracias a que cuenta con conexión a internet, el dispositivo traduce las palabras habladas al japonés, inglés, chino, francés, coreano, tailandés, bahasa (indonesio), español y vietnamita. Posteriormente, envía la información como texto a un teléfono inteligente o tableta con el que esté vinculada mediante Bluetooth.
El dispositivo está fabricado de un material plástico de color blanco, pero para mantenerla ajustada la cara es necesario utilizar una mascarilla de tela estándar.
Mask-C también es capaz de enviar la traducción como mensaje de texto, permite hacer llamadas telefónicas o ser usada como un amplificador de voz, una función especialmente práctica en espacios públicos.
Con un costo de$40 dólares por unidad, la startup nipona Donut Robotics, la compañía detrás de esta innovación, pretende enviar el dispositivo a compradores japoneses a partir de septiembre de 2020. Sin embargo, próximamente aspira a llegar a China, Europa y Estados Unidos.
Aunque en este momento el dispositivo solo funciona sobre la base de audio y texto, la compañía pretende ampliar la tecnología a sistemas de imagen, como realidad aumentada o realidad virtual, según reseña en su sitio web.
Originalmente Donut Robotics tenía previsto suministrar guías y robots traductores al aeropuerto Haneda de Tokio, pero tras el brote adaptó esta tecnología para desarrollar las mascarillas inteligentes.