Este miércoles 25 de noviembre, AstraZeneca y la Universidad de Oxford reconocieron un error de fabricación que está provocando serias dudas respecto a los resultados preliminares de su vacuna experimental contra el COVID-19.
Debido a una equivocación, se le administró a un grupo de los participantes una menor dosis de la esperada. En este grupo, la vacuna aparentemente alcanzó una afectividad del 90 por ciento.
En tanto, en el grupo donde se administró la dosis completa la efectividad fue de un 62 por ciento.
La noticia fue confirmada a través de un comunicado, donde se describe la equivocación, y se dio a conocer días después de que tanto la compañía farmacéutica como la universidad afirmaran que las dosis eran “altamente efectivas”.
Sin embargo, no explicaron por qué algunos de los voluntarios no recibieron la dosis que correspondía.
Lo extraño de todo esto, es que el grupo que recibió la dosis menor obtuvo una protección mucho mayor que los que recibieron ambas dosis completas.
Las dudas
La manera en que ambas instituciones llegaron a estos resultados y los reportaron ha generado una serie de cuestionamientos entre los expertos.
Tampoco el hecho de que combinaran ambos resultados para afirmar que la vacuna tendría, en definitiva, una efectividad aparente del 70 por ciento.
«Se toman dos estudios en los que se utilizaron distintas dosis y se presenta un compuesto (con resultados entremezclados) que no representa a ninguna de las dosis. Creo que a muchas personas no les agradó ese proceder», señaló David Salisbury, miembro del programa de salud mundial en el grupo de expertos Chatham House.
Los detalles completos de los resultados de los ensayos serán publicados en revistas médicas y se les entregarán a los reguladores británicos para que puedan decidir sobre la autorización para la distribución de la vacuna
Sin embargo, de acuerdo con un artículo de The New York Times, las probabilidades de que los reguladores de Estados Unidos y de otros países autoricen rápidamente el uso de emergencia de la vacuna de AstraZeneca, están disminuyendo dramáticamente debido a este error.
«Creo que han dañado realmente la confianza en todo su programa de desarrollo», dijo Geoffrey Porges, analista del banco de inversiones SVB Leerink.