Un estudio realizado por especialistas británicos señala que las personas con esquemas completos de vacunación tienen menos probabilidad de desarrollar COVID prolongado o persistente.
El análisis, realizado por expertos de la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés), observó la prevalencia de síntomas asociados con COVID-19 persistente (también conocido como “long COVID”) en personas que habían sido vacunadas y en personas que no fueron inmunizadas.
Los expertos revisaron cuatro estudios; de estos, tres indicaron que las personas con esquemas completos de vacunación tuvieron menos síntomas asociados al COVID persistente respecto a aquellos que no fueron inoculados.
Por ello, el estudio concluyó que las personas vacunadas con esquema completo de los biológicos de Pfizer-BioNTech, AstraZeneca o Moderna, o que hayan recibido dos inyecciones de la vacuna de Johnson & Johnson, tienen aproximadamente la mitad de posibilidades de desarrollar COVID persistente.
“El estudio muestra beneficios adicionales al recibir un esquema completo de la vacuna contra el COVID-19”, destacó Mary Ramsay, jefa de Inmunización del UKHSA.
El COVID persistente o COVID prolongado refiere a una serie de síntomas que se extienden por varios meses y que se asocian a una infección por SARS-CoV-2.
Algunos de los síntomas de estos padecimientos son fatiga, falta de aliento, así como dolor muscular o en las articulaciones.
Debido a que más de 400 millones de personas se han infectado de COVID-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció el COVID persistente como una enfermedad. De acuerdo con el organismo, por lo general los síntomas de este padecimiento se extienden por un plazo de tres meses después del comienzo de la enfermedad.