¿Recuerdas el ciberataque masivo a Yahoo? Después de ocho meses de mantener su inocencia, un ciudadano canadiense que trabajó para ayudar a la agencia de espionaje rusa FSB, se declaró culpable de participar en el hackeo masivo a Yahoo en el 2014, según ha señalado el Departamento de Justicia de los Estados Unidos en un comunicado.
Los cargos de conspiración, fraude, y robo de identidad, son debidos a una violación masiva en Yahoo que las autoridades afirman que fue dirigida por agentes de inteligencia rusos, y afectó a las cuentas de, al menos, 500 millones de usuarios.
Karim Baratov, de 22 años, apareció con un atuendo de prisionero ante un juez federal, que le cubría los tatuajes que se pueden ver en algunas fotografías, y se declaró culpable de un cargo de conspiración para cometer fraude informático y abuso, y ocho cargos de robo de identidad agravado. Sus respuestas fueron sucintas, con un simple «sí» y «no» a las preguntas del juez. No dijo nada más.
Las autoridades dicen que Baratov es un «hacker por contrato», afirmando que, como parte de su acuerdo de declaración de culpabilidad, admitió haber pirateado más de 11,000 cuentas de correo electrónico a nombre del Servicio Federal de Seguridad Ruso (FSB), además de también haberlo hecho para otros clientes.
Dijo que realizó ese trabajo por contrato desde el 2010 hasta su reciente arresto en marzo. Según reporta ABC News, Baratov fue arrestado en Hamilton, Ontario, donde aceptó renunciar a una audiencia de extradición y enfrentarse a los cargos en los Estados Unidos.
En declaraciones dadas a la prensa fuera del tribunal, los abogados de Baratov dijeron que su cliente había pirateado sólo ocho cuentas para los rusos y que no sabía que estaba trabajando para agentes rusos conectados con el ataque a Yahoo. «Nuestro cliente ha sido transparente y directo con el Gobierno desde que llegó aquí», dijo uno de sus abogados, Andrew Mancilla.
Además de Baratov, otros tres acusados, incluidos dos funcionarios del Servicio Federal de Seguridad ruso, fueron acusados de piratería informática y otros delitos penales. Los agentes rusos, Dmitry Dokuchaev e Igor Sushchin, usaron la información que robaron de Yahoo para espiar a periodistas rusos, funcionarios del Gobierno de los Estados Unidos y Rusia, y empleados de servicios financieros y otras empresas privadas, según las autoridades.