De acuerdo con información publicada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), los suelos de los hospitales en los que se trata a los pacientes con COVID-19 están colmados de coronavirus. También las suelas de los zapatos de la mitad de los miembros del personal médico que en ellos labora.
El reporte de los CDC se realizó basándose en pruebas llevadas a cabo en el Hospital Huoshenshan de Wuhan (lugar de origen de la pandemia) en las que el 94 por ciento de las muestras tomadas en la unidad de terapia intensiva dio positivo por coronavirus; también el 100 por ciento de las pruebas que se hicieron en las salas de cuidados generales en las que se atendió a pacientes que presentaban síntomas severos.
Estas cifras corresponden al punto más alto de la epidemia en la ciudad y complementan un estudio realizado en Italia en el que se concluyó que hasta un 20 por ciento de las personas que atienden a pacientes con COVID-19 están en riesgo de ser infectadas también.
Al hacer pruebas a las suelas de los zapatos del personal de terapia intensiva, se encontró que el 50 por ciento llevaba el virus y lo propagaba incluso a áreas por las que no pasan los pacientes con esta enfermedad.
La conjetura de los autores del estudio es que las gotitas de la respiración que emanan las personas infectadas son transportadas por el aire y la fuerza de gravedad, llevando el virus al suelo; se propone que el personal médico incremente aún más sus medidas de higiene.