La demanda colectiva fue presentada por David Lowery, líder de las bandas de rock alternativo Camper Van Beethoven y Cracker, quien tiene una larga historia en lo que respecta a la defensa justa de remuneración de los artistas. La demanda de $150 millones, presentada el 28 de diciembre, afirma que Spotify a sabiendas, ilegalmente distribuye música con derechos de autor sin la obtención de las licencias mecánicas adecuadas.
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Según la denuncia, Spotify ha admitido públicamente que no ha sido capaz de conseguir licencias para toda la música presente en la plataforma. Como se informó la semana pasada, fuentes cercanas a Spotify comentaron que la compañía de streaming ha destinado entre $17 a $25 millones para pago a los titulares de derechos, una vez que la identidad del beneficiario haya sido confirmada. Esto podría ser una señal de que admiten públicamente de que la denuncia tiene cabida.
La demanda fue presentada como una acción de clase colectiva, ya que el número de miembros excede los 100 y se pueden identificar fácilmente en los propios registros de Spotify. Si la demanda es aprobada, Lowery sería nombrado como el representante principal de la misma. Además de los daños reclamados, la demanda también requeriría que Spotify se abstenga de cualquier streaming sin licencia hasta que puedan obtener los derechos adecuados.
Spotify ha estado trabajando con la Asociación Nacional de Editores de Música (NMPA) «para encontrar la mejor manera de pagar correctamente las regalías a los editores y compositores», según lo señala la compañía en un post publicado en su blog de la semana pasada. El post menciona que el proceso tomaría «tiempo y esfuerzos significativos», pero ahora Spotify podría tener más incentivos para acelerar sus esfuerzos.
