Los días de esplendor de tu aspiradora robot Roomba podrían estar cerca del final, y no por un desperfecto técnico o por la obsolescencia del producto, sino más bien por un tema económico.
Todo se arrastra por la deuda enorme que tiene su fabricante: iRobot.
iRobot Corp. advirtió a los inversores que podría cerrar en los próximos 12 meses a menos que pueda refinanciar su deuda o encontrar un comprador. Según sus últimos informes financieros, la compañía está muy endeudada. Gastó 3,6 millones de dólares para modificar los términos de un préstamo de 200 millones de dólares que obtuvo en 2023 mientras se revisaba un acuerdo ahora muerto con Amazon, con el fin de obtener más tiempo para determinar sus próximos pasos.
Una de las razones que esgrimió la compañía es la dura competencia de las marcas chinas, que han bajado los precios y han modificado las ventas de aspiradoras inteligentes.
En su informe financiero trimestral publicado el 12 de marzo, la compañía, que vio caer sus ingresos en Estados Unidos en un 47 por ciento en el cuarto trimestre, dijo que había «iniciado una revisión estratégica formal para evaluar una amplia gama de alternativas, que incluyen, entre otras, la exploración de una posible venta o transacción estratégica y la refinanciación de nuestra deuda».
iRobot además señala que es totalmente posible un cierre, debido a «la demanda de los consumidores, la competencia, las condiciones macroeconómicas y las políticas arancelarias», y si no se encuentra otro recurso para pagar su deuda. 12 meses es el plazo.