Immortals Fenyx Rising combina lo mejor de The Legend of Zelda: Breath of the Wild y los juegos de la franquicia de Assassin’s Creed, reuniendo todo en un meticuloso paquete mitológico. Es un gran título, y si bien pide prestado mucho de otros juegos, lo nuevo que agrega también es bastante: desde un sistema exclusivo de mejoras de equipamiento hasta un evolucionado manejo de la resistencia. Son varios factores que hay que considerar en este juego, así que para que comiences de la mejor manera, en esta guía reunimos algunos buenos consejos y trucos sobre Immortals Fenyx Rising.
Llega al Salón de los Dioses
Al estilo más puro de Ubisoft, Immortals Fenyx Rising comienza con el personaje principal despertando en una playa, con un hermoso mundo abierto esperando ser explorado. Es tentador, pero no lo explores aún. Las primeras dos horas del juego sirven como un tutorial extenso, entregándote las herramientas que necesitas para el resto del juego. Eso incluye el Arco de Odiseo, el Vaso de Aiolos y las Alas de Ícaro.
No necesitas buscar activamente estas herramientas. Simplemente necesitas seguir el camino de la historia principal hasta que llegue al Salón de los Dioses, lo cual ocurre alrededor de las dos horas de juego. En este salón puedes mejorar tu equipo, habilidades, resistencia y salud, y como veremos más adelante, aquí también hay ciertas actualizaciones esenciales que debes realizar.
El Salón de los Dioses está ubicado en la segunda región del mapa que estás explorando. La primera región, en donde comienzas, es relativamente pequeña y tiene contenido alternativo limitado. Te recomendamos saltar este contenido secundario de esta región desde el principio y continuar en la historia principal por las primeras dos horas. Esto te entregará suficientes recursos para mejorar un par de cosas cuando visites el Salón de los Dioses por primera vez, además te enseñarán a volar, recorrer plataformas, resolver acertijos, dominar monturas y más.
Descubre los tipos de moneda y recursos del juego
Immortals Fenyx Rising es un juego de rol, pero no tiene el sistema tradicional de nivelación que hemos visto en otros títulos de este género. En vez de ganar experiencia a medida que progresas, ganas distintos recursos y dinero que puedes usar para comprar mejoras en el Salón de los Dioses. Para que quede claro, los recursos son distintos a la moneda virtual del juego, con la cual puedes comprar artículos cosméticos. Los recursos no puedes comprarlos, debes encontrar los ocho que existen en el juego.
Al principio, es confuso saber a qué mejora corresponde cada gema de color, así que aquí tienes todos los recursos del juego y para qué sirve cada uno:
- Ambrosía – Se usa para aumentar tu salud máxima. Puedes encontrarla en el mapa.
- Rayo de Zeus – Se usa para aumentar tu resistencia máxima. Lo conseguirás al completar las Bóvedas de Tártaro.
- Monedas de Caronte – Se usa para comprar Poderes de los Dioses y nuevas habilidades. Encontrarás estas después de completar los Desafíos de mitos.
- Ámbar dorado – Se usa para mejorar las pociones durante la creación. Se encuentran en los cofres y cortando cientos de árboles y arbustos que brillen.
- Fragmentos de adamantino amarillo – Se usan para aumentar la capacidad de la bolsa de pociones y de flechas. Se encuentran en cofres y grupos de fragmentos amarillos.
- Fragmentos de adamantino azul – Se usan para mejorar armas, armaduras y cascos. Se consigue al saquear cofres y derrotando enemigos comunes.
- Fragmentos de adamantino rojo – Se usan junto a los fragmentos de adamantino azul para mejorar armas. Se consiguen al derrotar enemigos particulares y saquear cofres resguardados.
- Fragmentos de adamantino púrpura – Se usa junto a los fragmentos de adamantino azul para mejorar armaduras y cascos. Se encuentran en grupos de fragmentos púrpura o saqueando cofres épicos.
Desbloquea tus primeras habilidades
Una vez que llegas al Salón de los Dioses, harás un recorrido por los diversos sistemas que puedes mejorar, incluyendo el de la Cisterna del río Styx. Aquí, puedes mejorar tus habilidades y, de hecho, hay unas cuantas que deberías conseguir antes de ponerte en marcha:
- Salto alto – Permite impulsarte hacia arriba mientras escalas. Además hace que consumas menos resistencia al escalar.
- Potenciador de deslizamiento – Hace que te muevas más rápido al deslizarte. También hace que consumas menos resistencia mientras realizas este movimiento.
- Impulso al nadar – Permite dar un impulso hacia adelante mientras nadas. También hace que consumas menos resistencia mientras nadas.
- Recolección por telequinesis – Reúne automáticamente todos los recursos en tu área tan solo recogiendo uno.
Estas cuatro habilidades no solo son las más baratas que, de hecho, se pueden comprar con solo dos monedas de Caronte, sino que también son las únicas relacionadas al movimiento (las otras habilidades tienen que ver con el combate). Moverse por el mundo es algo esencial en Immortals Fenyx Rising, por lo que es mejor invertir en habilidades de movimiento al comienzo para que disfrutes un poco más tu aventura.
Conoce cómo funciona el equipamiento y sus mejoras
La forma de gestionar el equipamiento en Immortals Fenyx Rising es un poco diferente en relación con otros juegos. Las armas, las armaduras y los cascos son todos, esencialmente, iguales. Todas las piezas de armadura proporcionarán la misma defensa y todas las armas provocarán el mismo daño basándose en su clase (dos espadas, por ejemplo, son iguales). El equipamiento se distingue por diferentes ventajas. La espada de Aquiles con la que comienzas el juego, por ejemplo, te entrega un 33 por ciento extra de daño con un combo de espada mientras tu salud está llena.
En vez de encontrar nuevo equipamiento para hacerte más poderoso, necesitas mejorar el que ya tienes en la Fragua de Hefesto en el Salón de los Dioses. Mejorar una pieza de tu equipamiento hará que todos los otros dentro de esa categoría también lo hagan (todos tus cascos mejoran a la vez, por ejemplo). Las mejoras entregan ventajas adicionales a tu equipo, las cuales puedes encontrar en el menú de pausa.
Debido a este sistema, es mejor enfocarse en las ventajas en lugar del equipamiento mismo, por lo que deberías cambiar tu equipamiento y estilo de juego en función de lo que estés haciendo. Por ejemplo, si estás explorando te servirá la Coraza Valor del Soldado, que te entrega una porción de resistencia adicional, y si estás enfrentando a un jefe, te servirá algo como el Orgullo del Gigante Tuerto, el cual ofrece un 30 por ciento más de defensa contra enemigos particulares.
No te preocupes mucho por cómo luce tu equipamiento tampoco. Si te gusta la apariencia de una pieza en particular de este, puedes aplicarla a otra que tengas en tu inventario en cualquier momento sin ninguna penalización.
Evita los daños por caídas
Si te caes en Immortals Fenyx Rising recibirás daño, así de simple. Es un poco molesto, especialmente con la cantidad de montañas y valles que hay el juego, pero hay una forma de evitarlo. Al principio del juego desbloquearás el doble salto y la habilidad de deslizarte un poco después. Luego de saltar, abre tus alas o realiza un doble salto uno o dos segundos antes de que aterrices y listo, se acabaron los daños por caídas. El uso breve de las alas poco antes de llegar al suelo te ayudará a ahorrar la resistencia necesaria para el planeo.
Gestiona tu resistencia
La resistencia es importante en Immortals Fenyx Rising. Si tienes más de ella, estarás mejor, así que es recomendable mejorarla al comienzo. Necesitarás el Rayo de Zeus para las mejoras de resistencia, las cuales puedes realizar en el Banco de Zeus, ubicado en el Salón de los Dioses (son cinco Rayos por cada porción de resistencia adicional). Para cuando llegues al Salón de los Dioses, habrás ganado poco menos de los cinco Rayos necesarios. Explora algunas Bóvedas de Tártaro que estén cerca y complétalos para mejorar tu resistencia antes de continuar tu aventura.
También puedes aumentar tu resistencia al comienzo, incluso antes de llegar al Salón de los Dioses. Hacia el final del prólogo, necesitarás completar un puzle en el Observatorio. Escala hacia la cima del Observatorio y encontrarás un cofre con la Coraza Valor del Soldado dentro, la cual te dará una cantidad de resistencia adicional. Si te la equipas removerás las Túnicas del Nuevo Olimpo que ganas al comienzo del juego, así que ten eso en cuenta. Estas te entregan una porción de salud adicional.
Lleva una dieta a base de granadas y champiñones azules
Tu personaje, Fenyx, necesita granadas y champiñones azules para sobrevivir, así que debes recoger la mayor cantidad que puedas mientras exploras el mundo. Las granadas restauran una parte de la salud y los champiñones azules restauran algo de resistencia. Aunque no restablecen tanto por sí mismos, puedes combinar granadas o champiñones azules para crear pociones de salud y maná en el Salón de los Dioses. Usualmente encontrarás champiñones azules a lo largo de los senderos de escalada –en un acantilado con algunas plataformas obvias para escalar, por ejemplo–, mientras que las granadas pueden ser encontradas en los árboles. Fíjate bien particularmente en las granadas, ya que son fáciles de pasar por alto.
También puedes comer champiñones azules mientras escalas, nadas o te deslizas, te entregarán tanta resistencia como champiñones tengas, siempre que estés dispuesto a comerlos. Por otro lado, si aún sigues trabajando en mejorar tu barra de resistencia, llénate de champiñones azules antes de una gran escalada o un gran deslizamiento. Vas a querer muchos de estos, unos 15 o 20, por lo menos.
Usa el tablero de tareas a menudo
En el Salón de los Dioses, encontrarás la Tabla de tareas heroicas de Hermes. Existen 36 tareas heroicas en el juego, abarcando todo, desde combate hasta exploración en general. Toma tantas tareas como puedas antes de salir a explorar. Generalmente, las tareas son sencillas; por ejemplo, te pueden pedir que derrotes a una cierta cantidad de enemigos o que reúnas una cierta cantidad de un recurso en específico, por lo que no deberías tener muchos problemas completándolas.
Al completar una tarea, ganarás una combinación de recursos basados en la tarea y ,a veces, incluso puedes recibir una nueva pieza de equipamiento. Considéralo como un ingreso pasivo.
Cambia de arma según tu propósito
Tienes tres armas en Immortals Fenyx Rising: un arco, una espada y un hacha. Sin embargo, es mejor que no dependas demasiado de solo una, ya que cada arma tiene un propósito distinto y cambiar entre ellas es esencial.
El arco es genial para herir enemigos inadvertidos, especialmente con el arco de Apolo. Usa esta arma para atacar a enemigos que están lejos o para anotar algunos golpes antes de que una turba te invada. El arco no causa mucho daño, así que ten en cuenta que, primero: tienes que apuntar a la cabeza, y segundo: usualmente tus flechas no serán suficientes para terminar el trabajo.
Tu espada sí puede terminar el trabajo, si es que no hay nada bloqueando tu camino al menos. La espada inflige daño directo, no por aturdimiento, y no causa tanto daño como el hacha. Sin embargo, la espada es rápida y si gastas algunas Monedas de Caronte para mejorar tus combos, puede hacer más daño que un hacha en un periodo más corto de tiempo. La espada debería ser tu arma principal cuando se trata de un combate.
Sin embargo, hay veces que no puedes conseguir un golpe limpio. Los enemigos con escudos pueden bloquear tus ataques con espada, pero hay una forma de evitar eso. Cada enemigo tiene una barra de aturdimiento además de la barra de salud. Llenar la barra de aturdimiento hará que el enemigo caiga por unos segundos, quedando libre para un bombardeo de ataques. Por otro lado, a diferencia de la espada, el hacha llena la barra de aturdimiento, así que si estás enfrentándote a enemigos con escudos, asegúrate de golpearlos con el hacha continuamente para llenar su barra de aturdimiento y, ojalá, también derribarlos.
Aturde a tus enemigos
A medida que progresas y enfrentas enemigos más grandes, el aturdimiento se vuelve esencial. Muchas de las peleas más difíciles en Immortals Fenyx Rising se centran en llenar la barra de aturdimiento de tus oponentes, arrasar con ellos infligiendo todo el daño que puedas cuando están caídos y retroceder para llenar la barra nuevamente.
El hacha es la mejor arma para aturdir, pero hay otras formas más efectivas de llenar la barra. Para enemigos grandes, usa las rocas. Puedes recoger una roca o una columna rota para lanzársela a un enemigo con un gran impulso y aumentar su barra de aturdimiento en gran medida. Los objetos más grandes funcionan mejor, así que, si estás entrando a una batalla particularmente difícil, toma un puñado de los distintos elementos que puedas recoger. Por otro lado, si usas la Fuerza de Heracles, puedes interceptar los proyectiles de tus enemigos y atrapar las rocas que te lancen. Cuando las tengas en tu poder, págales con la misma moneda y arrójales esas piedras.
También puedes aturdir realizando un parry, un movimiento en donde tu personaje esquiva los golpes y contraataca con un golpe crítico. Para realizar un parry, presiona LB y RB en Xbox, L1 y R1 en PlayStation o la Q en el PC justo antes de descargar un ataque. Si realizas un parry perfecto, además de llenar la barra de aturdimiento, ralentizarás el tiempo por unos segundos, permitiéndote realizar ataques adicionales o escapar a un lugar seguro.
Un par de consejos extra
Cuando estás en una pelea puedes aprovechar todo tu entorno, incluyendo a tus propios enemigos. Así que, si te ves superado en alguna batalla, sitúate detrás de ellos para usarlos como escudo. De esta manera, tus oponentes recibirán el daño que iba dirigido a ti y también aprovechas de ahorrar un poco de resistencia.
Por otro lado, domar monturas es importante en la exploración, por lo que algunos animales que veas a tu alrededor permitirán que te subas a ellos. Sin embargo, no puedes domarlos a todos, más específicamente a los animales hostiles. Quizás te tiente la idea de cabalgar sobre un oso, pero no lo hagas, ya que el intento solo terminará en una pelea. Los que sí puedes montar son animales con aspecto equino o cérvido, así que ten en cuenta eso para que no pierdas tiempo ni salud.