Hace algunos días informamos sobre el descubrimiento de 2020 CD3, una mini-Luna descubierta por astrónomos estadounidenses y que hace tres años que estaría en la órbita terrestre, de manera temporal.
Resulta que ahora el Observatorio Internacional de Géminis, en Maunakea, Hawaii, sacó las primeras imágenes nítidas del pequeño satélite y las publicó para deleite de la comunidad científica y de toda la gente.
La mini-Luna que fue designada como 2020 CD3, fue aprobada por el Centro de Planetas Menores de la Unión Astronómica Internacional, tras ser descubierto en la noche del 15 de febrero de 2020 por Kacper Wierzchos y Teddy Pruyne en el Catalina Sky Survey que opera en el Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona en Tucson.
Grigori Fedorets, el astrónomo principal de las observaciones fotográficas de la Luna en miniatura, comentó que el objeto podría ser un raro elemento rocoso natural, o podría ser algo que los humanos pusieron en el espacio hace décadas, esencialmente desechos espaciales: «De cualquier manera, este es un objeto muy convincente y necesita más datos para determinar qué es».
La imagen que se puede ver a continuación fue obtenida el 24 de febrero de 2020, y muestra simplemente un pequeño punto de luz contra las estrellas que se arrastran.
«Las estrellas se arrastran porque este objeto se mueve en relación con las estrellas de fondo y el telescopio Gemini North de 8 metros estaba rastreando este objeto», dijo Fedorets, y agregó que es difícil seguir objetos en movimiento como este con un gran telescopio como Gemini.
Por su parte, John Blakeslee, jefe de Ciencia del Observatorio internacional de Géminis comentó sobre la imagen: “Obtener las imágenes fue una lucha para el equipo de Géminis porque el objeto se está volviendo más débil a medida que se aleja de la Tierra. Se espera que sea expulsada de la órbita de la Tierra por completo en abril».
Por su parte, Grigori Fedorets, quien es astrónomo de la Queen University de Belfast en Irlanda del Norte, manifestó que «las observaciones adicionales para refinar su posición nos ayudarán a determinar la órbita de este objeto misterioso y su posible origen», y agregó que la reflectividad de 2020 CD3, también es una característica importante, ya que los cuerpos rocosos tienden a tener una reflectividad relativamente baja en comparación con cosas como los propulsores de cohetes gastados.