Lo que se creía era una enorme estrella en el corazón de la nebulosa de la Tarántula, también conocida como 30 Doradus, son en realidad varias estrellas. Así lo señala una nueva investigación que analizó la estrella llamada R136, una de las que conforman la gran Nube de Magallanes, región que contiene las estrellas de mayor masa descubiertas hasta la actualidad y cuya luminosidad es tal, que se puede apreciar a simple vista.
La investigación, publicada en la última edición de la revista Astrophysical Journal, donde participó la doctora Mónica Rubio, Premio Nacional de Ciencias Exactas 2021 y astrónoma de la Universidad de Chile que forma parte del Centro de Astrofísica y Tecnologías Afines, CATA. “Las estrellas de mayor masa no son tan masivas como pensábamos”, dice Rubio, respecto del nuevo estudio, que podría hacer replantear los modelos de formación estelar y sus etapas finales.
La doctora Rubio agrega que para llegar a éstos resultados se requirió más de un año de investigación utilizando el Telescopio Gemini Sur, ubicado en Cerro Pachón en la Región de Coquimbo. “Fue el gran espejo de 8.1m y el instrumento llamado “Zorro” el que nos permitió tomar las imágenes ópticas más nítidas que se pueden tomar desde tierra actualmente revelando que donde se creía había solo una estrella en realidad son varias”
Rubio explica que el siguiente paso será continuar con esta investigación y determinar las propiedades de estas estrellas, ya que al no ser tan masivas como se pensaba, “podría implicar que quizás las primeras estrellas en el universo tampoco fueron tan masivas como los modelos requieren”, dice la astrónoma. “Esto se podrá dilucidar con futuras observaciones solo posibles con el telescopio James Webb”, agrega.
En este trabajo junto a Mónica Rubio, participaron Venu Kalari, autor principal que estuvo como investigador asociado en el Departamento de Astrofísica de la Universidad de Chile (DAS) y Ricardo Salinas, astrónomo del observatorio Gemini Sur en la Región de Coquimbo, además de la colaboración de ingenieros chilenos del observatorio, junto a un equipo de la NASA. Los resultados fueron publicados con el título “Resolving the core of R136 in the optical”, publicado hoy en la revista Astrophysical Journal.