Una impresionante imagen espacial del Observatorio Europeo Austral (ESO) muestra a un espeluznante lobo cósmico, en una estructura apropiadamente llamada Nebulosa del Lobo Oscuro. Captada con el Telescopio de Rastreo VLT de ESO, en Chile, la imagen completa tiene 283 millones de píxeles y muestra la nebulosa ubicada a 5.300 años luz de distancia.
Muchas de las estructuras más llamativas que se ven en las imágenes espaciales son nebulosas, que son nubes de polvo y gas que a menudo albergan estrellas en formación. A menudo, estas nebulosas se iluminan con hermosos colores debido a la radiación de las estrellas jóvenes en su interior, que ioniza el gas y lo hace brillar. Pero esta nebulosa es todo lo contrario, siendo un tipo llamado nebulosa oscura. En estas nebulosas, el polvo que forma la nube es tan espeso y denso que impide el paso de la luz visible a través de él, apareciendo como una mancha oscura.
«Si pensabas que la oscuridad es igual a la vacuidad, piénsalo de nuevo», explica ESO. «Las nebulosas oscuras son nubes frías de polvo cósmico, tan densas que oscurecen la luz de las estrellas y otros objetos detrás de ellas. Como su nombre indica, no emiten luz visible, a diferencia de otras nebulosas. Los granos de polvo en su interior absorben la luz visible y solo dejan pasar la radiación en longitudes de onda más largas, como la luz infrarroja. Los astrónomos estudian estas nubes de polvo congelado porque a menudo contienen nuevas estrellas en formación».
Para capturar esta imagen, se tuvieron que tomar una serie de diferentes imágenes separadas utilizando diferentes filtros. Cada filtro captura una longitud de onda de luz particular, y cuando los datos se juntan, forman la imagen colorida y detallada que vemos. Las imágenes originales fueron tomadas como parte de un sondeo llamado VST Photometric Hα Survey of the Southern Galactic Plane and Bulge, que se centra en la parte principal de la galaxia vista desde el cielo del sur. También ha tomado hermosas imágenes previas de objetos como la Nebulosa de la Laguna y una zona llamativa del cielo llamada Ventana de Baade.
El sondeo se completó en agosto de 2018, pero los datos de los 500 millones de objetos que cubrió en nuestra Vía Láctea todavía se utilizan para el descubrimiento científico y para crear hermosas imágenes como esta. Si le apetece indagar en los datos por sí mismo, puede ver el tesoro completo de imágenes utilizando el Portal Científico del Archivo de ESO.