China quiere convertirse en un actor relevante en el ámbito de la exploración espacial. En fechas recientes, la Administración Nacional Espacial de China (ANEC) dio a conocer la cuarta etapa del proyecto de exploración lunar Chang’e.
Esta nueva fase se desarrollará en los próximos 10 años y contempla el lanzamiento al polo sur del satélite natural de tres aparatos científicos: Chang’e 6, Chang’e 7 y Chang’e 8.
Wu Yanhua, subdirector de ANEC, explicó en una entrevista con China Aerospace News que el primero en ser lanzado será el Chang’e 7, que cuenta con un orbitador, un módulo de alunizaje, un vehículo explorador y una pequeña sonda que puede despegar y volar de manera repetida.
Este aparato llevará a cabo varias tareas, aunque su misión más importante será investigar las condiciones geológicas y las características de la superficie lunar, además de detectar la existencia de hielo en el lugar.
El lanzamiento de esta nave está programado para 2023.
Una base con Rusia
De acuerdo con Wu, la Chang’e 8 tendrá que construir “el modelo básico de estación de investigación científica lunar”.
Según el funcionario, esta será la estación predecesora de la base científica tripulada que el gigante asiático quiere construir en la Luna de manera conjunta con Rusia.
Para esto, el programa también contempla la realización de viajes tripulados al satélite, los que deberían ser lanzados durante la cuarta fase del proyecto.
“Conocer y dominar más información sobre la Luna ayudará a elegir la ubicación de los alunizajes tripulados”, agrega Wu.
En este sentido, el investigador explicó que las sondas también ayudarán a determinar qué tipo de estudios científicos serán mejor realizar en la Luna.