SpaceX ha estado aterrizando con éxito la primera etapa de su cohete Falcon 9 durante la última década. Hacerlo permite a SpaceX utilizar un solo propulsor en múltiples misiones, lo que le permite reducir drásticamente los costes de lanzamiento y aumentar la frecuencia de lanzamiento.
Pocas otras compañías han hecho un esfuerzo real por emular la hazaña de SpaceX con un propulsor de primera etapa, aunque Blue Origin logró el mes pasado un hito al aterrizar la etapa principal de su cohete New Glenn en su segundo intento tras un intento fallido a principios de año.
El Rocket Lab de Nueva Zelanda está adoptando un enfoque diferente para la recuperación del propulsor, desarrollando un sistema que despliega paracaídas en un propulsor descendente para frenarlo, antes de enganchar la cuerda del paracaídas con un helicóptero usando un gancho de agarre y volarlo de vuelta a tierra. Aún no ha logrado la hazaña.
Y ahora la empresa china de vuelos espaciales LandSpace lo está intentando, aunque como puedes ver en el vídeo de abajo, su primer intento de aterrizar la etapa principal de su nuevo cohete Zhuque-3 terminó esta semana en fracaso cuando el propulsor impactó contra el suelo a gran velocidad.
El Zhuque-3 realizaba su primer vuelo de prueba orbital desde Jiuquan, en el noroeste de China, y aunque el cohete alcanzó con éxito la órbita, el aterrizaje con el propulsor no funcionó.
“Se produjo una anomalía después de que el motor de la primera etapa se encendiera durante la fase de aterrizaje, impidiendo un aterrizaje suave en la plataforma de recuperación designada”, dijo LandSpace en un comunicado ampliamente difundido. “Los escombros cayeron en el borde de la zona de recuperación, lo que resultó en una prueba de recuperación fallida.”
El equipo está llevando a cabo ahora una revisión exhaustiva de lo ocurrido y hará cambios en el sistema antes de intentarlo de nuevo.
Aunque es decepcionante para LandSpace, los errores en el desarrollo de vuelos espaciales son habituales. SpaceX sufrió muchos aterrizajes fallidos con su propulsor Falcon 9 antes de clavarlo, y sin duda LandSpace logrará la misma hazaña en poco tiempo.
A una escala mucho mayor, SpaceX también está trabajando en el proceso de aterrizaje de su enorme cohete Starship, que aún está en fase de pruebas. En varios de sus vuelos de prueba hasta la fecha, la compañía ha logrado traer de vuelta el propulsor Super Heavy de primera etapa del Starship asegurándolo justo por encima del suelo usando dos grandes brazos mecánicos.