Es el sueño de muchos y puede tomar toda una vida conseguirlo, literalmente. Eso sí, viajar al espacio no es para todos. Algunos se emocionan al imaginarlo o desearlo, otros, lo consiguen, aunque sea después de la vida.
Es la “hazaña” del actor James Doohan, conocido por interpretar al ingeniero jefe Montgomery Scott en la serie original de Star Trek, quien falleció en 2005 a los 85 años.
Al momento de su muerte, la familia del actor quiso cumplirle uno de sus mayores anhelos: viajar al espacio en la Estación Espacial Internacional (EEI).
Ellos se pusieron en contacto con quienes correspondía, sin embargo, todas las solicitudes oficiales fueron denegadas.
Esa respuesta no fue suficiente para Richard Garriott, uno de los primeros turistas espaciales financiado por fondos propios en viajar a la EEI. Según ha revelado recientemente a Times of London, Garriot consiguió llevar parte de las cenizas de James Doohan hasta la estación espacial, por supuesto, de manera clandestina.
El empresario pudo depositar las cenizas bajo el suelo del módulo Columbus, además de una foto laminada de Doohan. No le contó a nadie de su plan, y solo él y la familia del actor tenían conocimiento de esto, hasta ahora.
“Era completamente clandestino”, señaló Garriott al Times.
“Su familia estaba muy contenta de que las cenizas llegaran hasta allí, pero todos estábamos decepcionados por no haber podido hablar de ello públicamente durante tanto tiempo. Ahora ha pasado suficiente tiempo para que podamos hacerlo”.
En 2008, parte de las cenizas estaban en el cohete Falcon 1 de SpaceX. Sin embargo, el cohete falló minutos antes del despegue.
Cuatros años más tarde, una urna con parte de las cenizas de Doohan voló hasta el espacio a bordo del SpaceX Falcon 9.
De acuerdo con el mismo medio, las cenizas de Doohan han viajado en total unos 1,700 millones de kilómetros a través del espacio y han orbitado la Tierra más de 70 mil veces. Un verdadero y póstumo Viaje a las Estrellas.