Una pequeña nave espacial del tamaño de un horno microonda despegó este martes 28 de junio de la Tierra y va camino a la Luna, se trata de CAPSTONE, el satélite del programa Artemis I, que tiene como misión probar una órbita altamente elíptica alrededor del satélite natural.
CAPSTONE se lanzó a bordo del cohete Electron de Rocket Lab a las 5:55 a.m. ET desde el Complejo de Lanzamiento 1 de la compañía privada en Mahia, Nueva Zelanda.
¿Qué es CAPSTONE y qué importancia tiene para la NASA?
Es un CubeSat que establecerá una ubicación para un área de preparación ideal para misiones a la Luna y más allá. La órbita llevará a CAPSTONE dentro de las 1,000 millas de un polo lunar en su paso cercano y a 43,500 millas del otro polo en su punto máximo cada siete días, lo que requiere menos capacidad de propulsión para las naves espaciales que vuelan hacia y desde la superficie de la Luna que otras órbitas circulares.
«Después de un viaje de cuatro meses a su destino objetivo, CAPSTONE orbitará esta área alrededor de la Luna durante al menos seis meses para comprender las características de la órbita. Específicamente, validará los requisitos de potencia y propulsión para mantener su órbita según lo predicho por los modelos de la NASA, reduciendo las incertidumbres logísticas. También demostrará la fiabilidad de las innovadoras soluciones de navegación de nave espacial a nave espacial, así como las capacidades de comunicación con la Tierra. El NRHO proporciona la ventaja de una vista sin obstáculos de la Tierra, además de la cobertura del Polo Sur lunar», sostiene la NASA.
Objetivos de la misión:
- Verificar las características de una órbita de halo cis-lunar cerca de la rectilínea para futuras naves espaciales
- Demuestre entrar y mantener esta órbita única que proporciona un camino altamente eficiente hacia la superficie y el regreso de la Luna.
- Demostrar servicios de navegación de nave espacial a nave espacial que permitan a las futuras naves espaciales determinar su ubicación en relación con la Luna sin depender exclusivamente del seguimiento desde la Tierra
- Sentar las bases para el apoyo comercial de futuras operaciones lunares
- Obtenga experiencia con pequeños lanzamientos dedicados de CubeSats más allá de la órbita terrestre baja, a la Luna y más allá.