El Starliner de Boeing ha completado su primer viaje tripulado a la Estación Espacial Internacional (ISS), transportando a los astronautas de la NASA Butch Wilmore y Suni Williams tras su espectacular lanzamiento ayer. El Starliner se acopló a esta ISS a la 1:34 p.m. ET, después de un viaje de poco más de 24 horas desde su lanzamiento desde el Complejo de Lanzamiento Espacial-41 en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida.
Sin embargo, el viaje no fue del todo fácil, ya que hubo varias fugas de helio del Starliner. Una de ellas fue una fuga previamente identificada en tierra, que la NASA y Boeing investigaron antes del lanzamiento y determinaron que no era lo suficientemente grave como para representar una amenaza para la misión. Sin embargo, se identificaron dos nuevas fugas durante el vuelo además de esta fuga original.
«Antes de que la tripulación durmiera, los equipos de la misión identificaron tres fugas de helio en la nave espacial», escribió la NASA en una actualización. «Uno de ellos se discutió previamente antes del vuelo junto con un plan de gestión, y los otros dos ocurrieron cuando la nave espacial llegó a la órbita. Para monitorear y manejar estas fugas, los tres colectores de helio se cerraron en vuelo durante el período de sueño de la tripulación y se reabrieron antes de las operaciones de encuentro y acoplamiento».
Con el Starliner ahora acoplado, los equipos continuarán monitoreando las fugas para ver su gravedad.
La llegada a la Estación Espacial Internacional
También hubo un problema con el primer intento de acoplar el Starliner a la estación espacial, ya que hubo un problema con los propulsores de control de reacción del Starliner. Cinco de los propulsores, que son necesarios para alinear con precisión la nave espacial con el puerto de acoplamiento de la estación, se apagaron durante el vuelo. Luego, el equipo realizó una prueba de fuego caliente y pudo volver a encender cuatro de estos cinco propulsores, que fueron suficientes para que la nave espacial se acoplara de manera segura.
La escotilla de la ISS se abrirá en breve, lo que permitirá a Wilmore y Williams entrar en la estación y saludar a la tripulación allí. Se espera que pronto llegue más información de la NASA sobre los problemas con el Starliner y la gravedad de las fugas detectadas, aunque durante la transmisión en vivo los ingenieros de la NASA aseguraron que la nave espacial era segura y estable, aunque necesitarían observarla durante la noche para obtener más información.