Netflix tiene contenido más que suficiente para entretener a los televidentes, y series como El juego del Calamar (Squid Game) demuestran cuán universal se ha vuelto el streaming. De hecho, las series de Corea del Sur continúan destacando en los primeros lugares de las listas de Netflix en todo el planeta.
Sin embargo, la popular Squid Game ya quedó un poco en el pasado para los espectadores, porque ahora es el turno de ver Rumbo al infierno (Hellbound). Hablamos de una serie también surcoreana que se ha convertido en la más vista en la plataforma de streaming, eso es lo que indican los datos FlixPatrol, el sitio que recopila estadísticas de los servicios de transmisión en vivo.
Hellbound se estrenó el viernes 19 de noviembre y en 24 horas alcanzó el primer puesto de las series más vistas en Netflix en 35 países, como Brasil, Japón y Francia. Esta fue una hazaña que Squid Game demoró ocho días en lograr, pero cabe mencionar que esta aún se encuentra en la lista de las cinco mejores (con el cuarto lugar a la fecha).
La nueva y sangrienta serie Hellbound se centra en las acciones violentas de un equipo de demonios. Estos persiguen a los pecadores que han sido visitados previamente por un ser celestial, quien les avisa a las víctimas la fecha y hora de su muerte.
Estas enormes criaturas peludas incineran a sus víctimas y las envían al infierno, lo que genera un estallido de histeria pública y fanatismo religioso en la población. De esa forma, los religiosos llegan al poder predicando la justicia divina.
Sin embargo, hay un grupo de personas que sospecha de las actividades y creencias de los religiosos e intenta luchar contra este al investigar su participación en eventos misteriosos.
Hellbound fue escrita y dirigida por Yeon Sang-ho, conocido por la película de zombis Train to Busan (2016) y Peninsula (2020). El piloto de la serie se estrenó en el festival internacional de cine de Toronto 2021 en septiembre.
“Trata sobre un incidente sobrenatural que ocurre en medio de Seúl, y en esa sociedad caótica las personas con diferentes creencias chocan”, comentó Yeon en una rueda de prensa la semana pasada.
Pero eso no es todo, también mencionó que, a pesar de los elementos ficticios que presente, la serie ofrecerá un retrato realista de la sociedad.
Todo indica que Hellbound seguirá los pasos de Squid Game en términos de popularidad. Esta última se estrenó el 17 de septiembre y pasó 46 días (no consecutivos) en el primer puesto de las series más vistas de Netflix.
Según estimaciones, 142 millones de hogares vieron Squid Game en 94 países durante octubre. Y en cuanto a las ganancias para el gigante del streaming, que es Netflix, la serie generó $900 millones de dólares.
A principios de este mes, Hwang Dong-hyuk, director de Squid Game, dijo que una segunda temporada estaba en camino, aunque todavía no hay detalles de cuándo ocurrirá. Y por el lado de Hellbound, nadie ha mencionado nada, pero (sin dar mayores detalles) el desenlace apunta a que la historia continuará, algo que los seguidores esperan con ansias.
Al parecer, los dramas coreanos llegaron para quedarse. Squid Game consiguió que millones de personas en todo el mundo vieran por primera vez una serie de Corea del Sur, y antes la película Parasite, de Bong Joon-ho, sentó las bases de este fenómeno coronándose como la mejor en los Premios de la Academia de 2020.