El Sony Z9G muestra que el futuro de los televisores 8K es brillante.
Lo bueno
- La experiencia visual es preciosa
- Imágenes excepcionalmente nítidas
- Android TV es más veloz
- Compatible con AirPlay 2, HomeKit, Alexa
- Excelente conversión de 4K a 8K
Lo malo
- Los negros parecen de IPS
- Voluminoso
Acabo de pasar dos horas en un salón con un televisor Sony Z9G 8K HDR de 85 pulgadas. No fue para nada suficiente tiempo. Quiero más. Para una revisión de verdad necesito más. Pero es poco probable que el Z9G llegue a mi laboratorio de pruebas porque… bueno, es grande, pesado, costoso y difícil de transportar.
LOS GRANDES TELEVISORES 8K TIENEN SENTIDO, EL Z9G ES PRUEBA DE ELLO
Antes de siquiera comenzar a hablar de este televisor, debo justificar su existencia. Triste, pero cierto.
Algunos de ustedes ya estarán debatiendo conmigo en su cabeza. Lo entiendo. Por alguna razón no quieren que lo que digo sea verdad. Quizá les molesta que haya algo nuevo que no pueden comprar (aunque eso significaría que en secreto la desean, ¿cierto?). O podría ser que odian el estado de nuestro sistema capitalista, que motiva a los fabricantes a ir cada vez más lejos, tecnológicamente hablando, aunque desde un punto de vista práctico no tenga sentido. O tal vez te consideras conocedor de la industria y piensas que es una mala estrategia por parte de gigantes como Sony.
Todo eso es válido. Yo no estoy aquí para juzgar. Solo quiero señalar algunos datos para que los pongas en la balanza como te parezca mejor.
Solo quiero señalar algunos datos para que los pongas en la balanza como te parezca mejor.
Comencemos aludiendo a un ejemplo muy claro de por qué la TV 8K tiene sentido: la TV 4K. Nos encontramos de vuelta donde estábamos cuando la 4K apareció hace seis años y medio, solo que con cuatro veces más pixeles.
LG sacó su primer televisor 4K (el 84LM9600 de 84 pulgadas) a fines de octubre del 2012, por el gran precio de $20,000 dólares. En contraste, el Z9G de Sony es una pulgada diagonal más grande y su precio de lanzamiento es de $13,000 dólares.
En ese entonces hubo mucha indignación por un televisor 4K de 84 pulgadas de $20,000 dólares, pero el tiempo pasó, la tecnología se filtró hacia abajo y ahora puedes comprar un televisor 4K HDR decente de 65 pulgadas por $500 dólares. Y puedes adquirir un aparato increíble 4K HDR de 65 pulgadas por $820 dólares.
Tal vez podemos ver al Z9G como lo que es: el umbral del futuro de la televisión. Así como los televisores 4K prepararon el camino para la producción de contenido 4K, el caso de los 8K será el mismo.
BUENO, ¿Y QUÉ TAL ESTÁ EL TELEVISOR?
El Sony Z9G es fantástico. No me sorprendería terminar calificándolo como el mejor televisor LED 8K de este año, aunque todavía me quedan algunos meses para decidir. Solo tengo dos quejas. Me parece que tiene un panel IPS, y en algunos momentos sentí los negros un poco grises – solo un poquito. Además, es caro, lo que no me sorprendió en lo más mínimo.
Todo lo demás, por lo que vi durante mis dos horas, parece excepcional. Especialmente el procesamiento. El procesador X1 Ultimate de Sony es excelente para conservar los detalles en los objetos y escenas brillantes, prácticamente elimina el bandeado cuando las imágenes hacen fade in y fade out, limpia mucho ruido, cuenta con un mapeo de color y tonos insuperable y transmite la “intención del creador” como nadie. Algo quizá más importante es que mejora el contenido 4K y 4K HDR extremadamente bien. Eso es bueno, porque nadie verá contenido nativo en 8K en este televisor en el futuro cercano.
El procesador X1 Ultimate de Sony es excelente para conservar los detalles en los objetos y escenas brillantes.
A menos, claro, que veas al televisor reproducir el demo de Sony en 8K HDR en su tienda local. Si lo ves entenderás lo que el video 8K en 85 pulgadas y más significa en términos de realismo. Cuando los insignificantes 45 pixeles por pulgada en un televisor 4K de 85 pulgadas son sustituidos por los 90 pixeles por pulgada de un televisor 8K de las mismas dimensiones, y cada uno de esos pixeles recibe exactamente lo que fue grabado con una cámara 8K, la imagen resultante es la verdad en 8K. El televisor Z9G 8K que vi hoy está mucho más lleno de detalles y realismo que cualquier televisor 4K LED del mismo tamaño que haya visto anteriormente.
Parte de la razón por la que me agradó lo que vi es que la tecnología Backlight Master Drive de Sony está de vuelta, y se ve genial. Puede que lleve un panel IPS, pero hace una labor increíble haciendo que el panel se vea excelente, con lo que parecía ser un mínimo de halos y justo la luminosidad precisa. Este televisor no intenta abrumar a tus ojos. Los seduce; luego te asombra.
También estuve encantado de ver que el sistema Android TV que Sony utiliza finalmente está impulsado por un procesador suficientemente poderoso como para obligarlo a obedecer. Android TV es ágil y sensible en el Z9G y (espero) también será parte de otros modelos Sony este año.
Para quienes no les guste Android TV, AirPlay 2 y HomeKit de Apple estarán presentes este año a través de una actualización de firmware, y el Z9G también es compatible con Alexa de Amazon. Se pueden dar comandos de voz al oprimir un botón en el recién diseñado control remoto, o la función de “siempre escuchando” que se encuentra disponible en casi todas las bocinas inteligentes puede activarse dentro del televisor, sin necesidad de hardware o bocinas adicionales. Independientemente de la plataforma de asistente inteligente que prefieras, el Sony funcionará con ella.
El caso es el mismo para los formatos HDR. Sony es compatible con HDR10, Dolby Vision y Hybrid Log Gamma.
Y por cierto, ese control remoto recién rediseñado es un cambio refrescante de Sony. Estamos encantados de verlo, y nos agrada ver que incluye un botón de configuración para ayudarte a franquear todas las capas que Android TV pone entre el usuario y su configuración de imagen.
Tengo que mencionar lo voluminoso que es este televisor. Mi comentario al equipo de Sony fue, “Parece un televisor montado en otro televisor”, y aunque creo que eso lo resume bien, debo aclararlo y señalar que este sándwich de televisores está hecho con pan grueso. Eso le molestará a quienes prefieran un look más aerodinámico y futurista.
Antes de concluir debo hablar de la calidad de su sonido. Sony se esforzó mucho para optimizar el sonido para que parezca surgir del televisor y se sienta mucho más amplio. En el demo que escuché fue convincente, pero antes de calificarlo de ganador tendría que oír más. Sin embargo, francamente, un televisor así de hermoso se merece al menos una barra de sonido fenomenal, si no es que un sistema surround Dolby Atmos completo.
