Alrededor de una docena de empleados de Google están renunciando a sus posiciones dentro la empresa, en protesta por la participación del gigante tecnológico en Project Maven, un controversial programa militar que usa inteligencia artificial.
Project Maven, también conocido como Algorithmic Warfare Cross-Function Team, fue lanzado en abril de 2017 y es un programa utilizado por las fuerzas armadas de los Estados Unidos, que aprovecha la inteligencia artificial para mejorar la orientación de los drones.
Entre sus objetivos, el proyecto tiene como propósito desarrollar e integrar «algoritmos de visión artificial” que son necesarios para ayudar a los analistas militares y civiles con el volumen total de datos de video en movimiento recopilados todos los días, en apoyo a “operaciones de contrainsurgencia y antiterrorismo», según explica el Departamento de Defensa de los Estados Unidos.
Este proyecto ha sido motivo de preocupación para varios empleados de Google. El mes pasado, más de 3,100 trabajadores firmaron una carta al director general de la compañía, Sundar Pichai, pidiéndole que no involucre al gigante tecnológico en Project Maven, sin obtener resultados a sus requerimientos.
Según informa Gizmodo, las preocupaciones de los empleados que decidieron renunciar a sus puestos van desde situaciones éticas sobre el uso de la inteligencia artificial en drones utilizados para operaciones de guerra, hasta dudas sobre las decisiones políticas de Google, que podrían crear una posible erosión de la confianza de sus usuarios. En el reporte se cita un documento interno de Google, que contiene cartas y escritos de muchos de los empleados que detallan sus razones para de retirarse de la compañía.
Por su parte, el Departamento de Defensa ya había señalado desde hace más de un año que su fuerza de trabajo estaba abrumada por la cantidad de datos que reciben, en particular las imágenes de video.
En un memorándum publicado en abril de 2017, el entonces Subsecretario de Defensa, Bob Work, escribió sobre el Proyecto Maven, diciendo que aunque habían tomado medidas tentativas para explorar el potencial de la inteligencia artificial, estaba “convencido de que tenemos que hacer mucho más y avanzar mucho más rápido en el Departamento de Defensa, para aprovechar los avances recientes y futuros en estas áreas críticas».
Hasta el momento de escribir esta nota, Google aún no ha emitido ninguna declaración respecto a la decisión de sus empleados de abandonar la compañía.